Limpios para combatir la pobreza

En el planeta tierra de 510.1 millones de km² y de aproximadamente 8 mil a 200 millones de personas, existen niños, jóvenes, adultos, heterosexuales, homosexuales, personas de distintas creencias religiosas, ideologías políticas y clases sociales. La pobreza no es algo nuevo en la tierra. La pobreza es la carencia de los recursos necesarios para satisfacer las necesidades básicas de una persona o población, es normal que todos queramos vivir en un sitio elegante con todas las comodidades que tiene una persona pudiente, rica o adinerada, más eso no es fácil ni posible en varios lugares, condiciones y momentos de nuestras vidas. 

Japón es un país de 22.85 millones de habitantes, aunque tenga un importante ingreso per cápita, también tiene a pobres en su población. Para enfrentar esta condición responden con la sgte filosofía; “cuando alguien no puede empezar algo, le pedimos que lave el suelo. Después, actúa sin resistencia, con ganas y calidad». Los japoneses destacan por su extraordinaria disciplina y su concentración total en cualquier tarea. 

Empezar por lo básico

Uno de sus secretos es vencer la pereza utilizando la limpieza y el orden como diagnóstico. No toman demandas cómo el aseo u orden cómo unas ofensa, lo hacen y tiene efectos importantes en la mente de su población, que viviendo en espacios limpios y ordenados por ellos mismos eleva su autoestima y les lleva a emprender proyectos académicos o laborales que sirvan para no experimentar la pobreza que desafortunadamente existe en varios países del mundo, por varias razones cómo el estado económico y financiero de los países, la poca o nula inversión en ellos o el espíritu de su población. La misma que puede servir para construir o destruir cosas en su país. 

En Paraguay hay aproximadamente 927.628 personas pobres o carentes de necesidades básicas. Que trae consigo una serie de perjuicios para el pobre y la comunidad de personas con los que vivan, cómo;

•  Malnutrición y Hambre: Es una de las consecuencias más directas, afectando especialmente a niños y niñas (desnutrición crónica).
• Enfermedades: Mayor propensión a sufrir y morir por enfermedades infecciosas, parasitarias, y padecimientos prevenibles o curables.
• Carencia o dificultad para acceder a medicamentos y servicios de salud de calidad.
• Condiciones de higiene precarias.
• Menor Esperanza de Vida: En países pobres, la esperanza de vida es significativamente menor en comparación con los países desarrollados.

El japonés aplica en su vida el Sérigakuzai que es una práctica japonesa que se traduce como “organización” o “limpieza consciente”. Es mucho más que una técnica o rutina doméstica, se trata de una filosofía de vida que tiene sus cimientos en la idea de que el desorden exterior es un fiel reflejo del desorden interior, y para corregir esos dilemas interiores debemos arreglar el exterior de nuestras mentes, eso serviría para tener ordenadas y limpias nuestras vidas