El primer ministro de Israel, Yair Lapid, anunció este domingo que cooperará con Albania en el ámbito de la cibernética al reunirse en Jerusalén con el primer ministro albanés, Edi Rama, quien culpa a Irán de dos ataques cibernéticos ocurridos este año contra su país.
“Irán es una amenaza compartida para Israel y Albania, lo hemos visto durante los recientes ciberataques iraníes contra Albania. Israel colaborará en la medida de lo posible en el esfuerzo contra Irán, lo consideramos un interés nacional y una obligación histórica”, dijo Lapid al inicio de la reunión, según un comunicado de su oficina.
CIBERSEGURIDAD
Ambos dirigentes hablaron sobre la cooperación “en el ámbito de la cibernética” y otros temas, así como del fortalecimiento de los vínculos bilaterales y de la superación de los retos comunes que enfrentan, “haciendo hincapié en la amenaza iraní”, añadió la misma fuente.
Durante su visita de tres días a Israel, Rama también se reunirá con el presidente, Isac Herzog; el líder de la Knesset (Parlamento), Mickey Levy, y el ministro de Finanzas, Avigdor Liberman, además del jefe de la Dirección Nacional de Ciberseguridad de Israel, Gaby Portnoy, según la prensa local.
ATAQUE
El 15 de julio, el portal de servicios públicos e-Albania dejó de funcionar repentinamente, así como varias páginas gubernamentales, incluida la del primer ministro Rama, cuya recuperación de datos y funcionamiento total tardó casi un mes en conseguirse.
Albania culpó a Irán -enemigo de Israel- de “orquestar y financiar” el ataque cibernético y rompió sus relaciones diplomáticas con el país islámico en septiembre.
Días después, Albania fue víctima de otro ataque que inhabilitó el sistema de registro y control de datos de la policía fronteriza.
La ONU, la OTAN, Estados Unidos y la Unión Europea apoyaron la atribución de los ataques a Irán.
CONDENAR
Israel, de su lado, condenó los ciberataques asegurando que la República Islámica representa “una amenaza” para el mundo, y ofreció asistencia en materia de ciberdefensa a Albania.
Irán condenó la decisión de Albania de romper relaciones diplomáticas y calificó de “infundadas” las acusaciones en su contra. También manifestó su disposición a enviar a un equipo de investigadores a Albania para esclarecer el asunto.
En Albania viven unos 3.000 disidentes del régimen de Teherán que son integrantes de la Organización de los Muyahidines del Pueblo de Irán, conocida como MEK, lo que ha provocado en varias ocasiones tensiones entre los dos países.
Estos iraníes exiliados empezaron a llegar a Albania en 2013, cuando este país los acogió por razones “humanitarias” por petición de Estados Unidos.
“Los valores y principios del pueblo albanés llevaron a sus ciudadanos a arriesgar sus vidas para salvar a los judíos durante el Holocausto. Les dieron cobijo y encontraron la manera de alejarlos de los nazis. Nunca olvidaremos a quienes estuvieron a nuestro lado”, comentó Lapid este domingo. EFE