¿Instruirse o no?

Desde siempre ha existido la educación en el mundo, o el ejercicio de enseñar y aprender desde lo más básico cómo la pronunciación de palabras, caminar, alimentarse, asearse, vestirse y relacionarse con otras personas hasta lecciones más específicas en relación al agrado o búsqueda personal de cada uno en institutos, universidades y lugares que ofrezcan lecciones desde cocina hasta ciencias que demanden más preparación. 

Desde el aterrizaje de las siglas (IA), Inteligencia Artificial algunos se preguntan; ¿vale la pena seguir estudiando una carrera universitaria?, porque todo lo que uno crea conocer o manejar bien al concluir sus estudios universitarios, ya lo saben o manejan hasta mejor nuestros dispositivos o herramientas de comunicación, estudio o trabajo que conectados a la red internacional pueden investigar, calcular, redactar e informar sobre lo que se desee. Una realidad que presenta desafíos para las universidades y personas dedicadas o preparándose para enseñar. 

Y hasta para quien quiera aprender algo en particular que entre las serias amenazas de aceptar la democratización de la IA no solo se encuentra la posibilidad de perder un empleo porque el empleador decidió construir líneas de ensamblaje digitales que prescinden el uso de mano de obra humana. Esto nos cuestiona; ¿entonces ser humano ahora que harás?, y nos lleva a meditar realmente sobre cuál y cómo puede ser nuestro futuro en la tierra.que reúne las condiciones exactas para vivir, donde no solo existe el ser humano sino un importante número de plantas y animales. 

Cambios dramáticos

Aunque algunos ya vayan entrando a la gris y triste lista de extintos y solo nos toca despedirnos de verlos, escucharlos o tenerlos en nuestro planeta que ha experimentado muchos cambios desde siempre, más hoy días esos cambios son más intensos, solo hable con sus padres, abuelos o tíos y pregúntele cómo iban a sus escuelas y cómo eran las clases que tomaban, cómo hacían para tener redes sociales que no eran virtuales sino reales porque en aquella época internet todavía no había llegado y no existían facebook, instagram, twitter youtube, tik tok y la red que use para tener organizados y comunicados sus grupos de amigos, familia, estudio o trabajo. Campo en el que las cosas ya se encuentran cambiando fuertemente porque hoy día hay un programador o analista de sistema en las antípodas del Paraguay que hace el trabajo de una o más personas. 

Debemos tener en cuenta que estudiar hoy, en plena era de la inteligencia artificial, no es una apuesta obsoleta: es un acto de resistencia intelectual y de preparación para lo desconocido. Las máquinas pueden procesar información, pero no pueden dotar de sentido a esa información. Sentido que resultaría muy difícil ser denotado por cualquier máquina que carezca de consciencia y emociones y haya sido diseñada y construída para servir a terráqueos o seres humanos cómo usted y yo. 

Estas palabras fueron inspiradas por María Teresa Ballestar que  es una profesora e investigadora con una destacada trayectoria. Posee una Licenciatura en Estadística, un M.Sc. en Marketing e Investigación de Mercados, un Máster en Sociedad de la Información y el Conocimiento y un Doctorado en Economía Aplicada. Un ser  humano con Inteligencia Real por los datos que me da la red internacional pero que sirven para meditar en torno al valor del estudio en estos tiempos de dudas en torno a la inteligencia artificial y su indetenible ascenso.