Desde el Gobierno aseguran que existen 12 títulos superpuestos pero que pedirán la consideración para que las comunidades indígenas puedan ocupar nuevamente el lugar. Ayer se movilizaron en Asunción para acelerar el proceso.
Un importante número de indígenas de la comunidad Ka’a Poty, perteneciente a la parcialidad Ava Guaraní, situada en el distrito de Itakyry del Departamento de Alto Paraná iniciaron sus movilizaciones ayer en el microcentro de Asunción exigiendo al Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) insistir con el proceso judicial que les permita volver a su ciudad.
“Esta gente (los indígenas) había promovido un interdicto para recobrar la posesión de las tierras, por lo que pusieron un abogado particular y perdieron en todas las instancias. Es con relación a una tierra que el INDI había adquirido en el año 1995 siendo el presidente en aquel entonces Valentin Gamarra”, comentó Édgar Olmedo, actual presidente del INDI.
El titular de la cartera explicó que en ese tiempo la compra se había hecho a “libro cerrado” y nunca se pudo constatar la ubicación ni la ocupación sobre la supuesta posesión del título. “Eso generó que una persona, en este caso una ex fiscal del Alto Paraná, promueva un juicio de interdicto demostrando que ella era titular de una fracción de inmueble de 7 hectáreas”, refirió.
Según informó el presidente del Indi, se consiguió una resolución de desalojo sobre estos indígenas por lo que ahora solicitan algún tipo de defensa.
“Nosotros planteamos una mensura judicial, una acción autónoma de nulidad porque la sentencia del interdicto afectado también es el INDI y planteamos una reivindicación de inmueble. Estos antecedentes de acciones que promovimos presentamos a la jueza que lleva adelante la causa para que suspenda el desalojo, pero ya no atendió nuestra presentación”, aseguró.
De acuerdo con los datos recabados, la propiedad en Alto Paraná contempla un total de 1.340 hectáreas y 12 superposiciones de títulos sobre la misma. Los miembros de las comunidades originarias marcharon por Asunción y finalmente se instalaron de forma precaria en la Plaza de Armas, con carpas improvisadas que no son suficientes para resguardarse del frío.
“Dentro del derecho de la reivindicación planteamos medidas cautelares para que nosotros podamos tener la posesión de esas tierras y esta comunidad que fue desalojada vuelva a ocupar la misma”, aseguró el presidente del INDI.
En el mismo sentido, señaló que todas estas personas insisten en que tiene potestad sobre los inmuebles.
Marta Díaz, lideresa de la comunidad Avá Guaraní, dijo antes lo medios de comunicación que están la ciudad porque fueron expulsados de sus tierras.
Mbya Guaraní
Por otra parte,, desde la Federación por la Autodeterminación de los Pueblos Indígenas (FAPI) piden al Estado paraguayo garantizar la vida de los miembros de la comunidad indígena Mbya Guaraní.
El documento que se socializó ayer y está dirigido al presidente de la República, Mario Abdo Benítez, expresando su preocupación por la situación de las comunidades indígenas que viven desde tiempo inmemoriales en su territorio ancestral denominado Tekoha Guasu, reserva para Parque San Rafael.
“Estas comunidades desde hace tiempo se encuentran sufriendo una falta de respuesta efectiva a sus reclamos”, apunta la misiva. Resalta que las comunidades indígenas del pueblo Mbya Guaraní tienen más de 14.000 hectáreas aseguradas. “Sobre ellas sufren los impactos de la deforestación, cultivos ilegales y atropellos por parte de personas extrañas a estas”, puntualiza.