Detrás de cada gol, de todos los campeonatos obtenidos y de una vida exitosa como futbolista, hay en realidad una historia dura envuelta en delincuencia y drogadicción.
Esa fue la niñez que tuvo que afrontar Carlos Tevez, actual jugador del Club Atlético Boca Juniors y cuya historia se relata en la serie de Netflix “Apache: la vida de Carlos Tevez”.
Toda la trama se desarrolla en el Fuerte Apache, localidad de Ciudadela de Buenos Aires, donde Carlos vivió y se crió con su familia adoptiva.
Un barrio donde quienes mandaban eran los traficantes de drogas, que mataban a sangre fría a quienes se interponían en sus negocios. Carlitos tenía un mejor amigo llamado Danilo al que apodaban ‘Uruguayo’ y con quien fue a probar a Liniers, club al que no logró entrar.
LLEGADA A BOCA
Luego de no quedar, Tevez regresa a All Boys, donde dio sus primeros pasos en el deporte rey, hasta que un día lo llevan para convertirse en «Xeneixe».
A pesar de tener solo 17 años, Carlos se concentra en mantener un buen ritmo de juego en Boca, hasta que el gran día llegó: lo llaman a la Primera y debuta en La Bombonera como titular.