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El retorno a la normalidad en Estados Unidos es prácticamente común. Ya es muy difícil encontrar personas que usen tapabocas en las pequeñas poblaciones de Carolina del Sur y también en Atlanta.
Solo en los lugares cerrados y en algunos bastante concurridos como los aeropuertos, se pueden ver personas con mascarillas. Muy poca gente utiliza la mascarilla como parte de un protocolo sanitario.
En la mayoría de los casos, incluso en los pueblos más pequeños, se ofrecen vacunaciones gratuitas y test de PCR sin ningún tipo de costo.
Cada vez los números son más favorables para un país que ha tenido más de 600.000 fallecidos, lo que significa una cantidad mucho mayor que todos los soldados caídos en las muchas guerras en las que ha estado envuelto este país.
Estados Unidos retorna a la normalidad. Lo que deberíamos hacer entre todos a nivel global es recuperar la misma condición, pero para eso hacen falta vacunar como mínimo 4.000 millones de seres humanos.
