A la hora de elaborar la lista de prendas básicas para conformar un armario, es imposible no pensar en diferentes tipos de blusas blancas. Más allá de la clásica de algodón y cuello redondo, durante las últimas temporadas han sido las remeras de tirantes y de marcado acento noventero las que han conquistado el “street style”, desde Copenhague hasta París.
La temporada de otoño-invierno 2022 dio nuevamente la bienvenida a la clásica musculosa blanca, que nunca es insípida cuando desfila en las pasarelas de la mano de marcas como Prada, Bottega Veneta y Chloé, según dio a conocer Vogue España.
Mientras Miuccia Prada aboga por combinar blusas sin mangas con faldas, en Bottega el espíritu es más pragmático, que festivo, por cortesía del nuevo director creativo de la casa, Matthieu Blazy. Así, tops suaves y ajustados más simples y clásicos se destacaron en los desfiles.
Tanto Prada como Bottega Veneta han puesto el foco en esta prenda y se han negado a hacer de estas blusas una indumentaria básica con la que completar prendas mucho más llamativas, convirtiéndolas en pieza central de los looks.
A su vez, en Chloé la visión ecológica de Gabriela Hearst nos recuerda, según su costumbre, que la moda no es desechable, incluso si se trata de una blusa blanca, una prenda básica de cualquier armario.
Las musculosas de obrero de la mencionada activista medioambiental fueron la base de su hermosa estética, demostrando que cuando inviertes en piezas de calidad, estas destacan por sí solas.
Durante la próxima temporada, nada resultará más “chic” que un top de tirantes blanco, por ejemplo, dentro de un pantalón de cuero o combinándola con faldas como lo hicieron renombradas firmas.
Las opciones que ofrece esta prenda son numerosas. De cara a la próxima temporada, una de las fórmulas preferidas consiste en utilizar la indumentaria por debajo de gabardinas o chaquetas de cuero.
El “reboot” de la musculosa es el paradigma de una temporada de básicos mejorados y la sofisticación de gestos sencillos como, por ejemplo, atarse el jersey a la cintura, al igual que la implementación de Bottega en las pasarelas.
Mientras que las tendencias maximalistas o extravagantes se repiten en todas partes, desde la persistencia de las botas descomunales en altura hasta la exhibición de hectáreas de piel, vale la pena destacar que el minimalismo gana ciertas partidas.
