Todavía no tengo la bendición de ser padre, más de mi experiencia cómo hijo soy consciente que es uno de los roles más complejos en la vida de cualquier persona que al tomar la decisión de embarazar y embarazarse se enfrenta a una importante apuesta a su vida que no se trata de culminar una carrera universitaria, tener una responsabilidad en una empresa o institución sino el criar y cuidar un ser vivo. La misma precisa tener no solo afecto y cariño sino también seguridad y buena educación y atención a su vida y salud.
El dónde y cómo se educará un hijo es una de las preocupaciones más importantes que tiene todo padre. Por eso la elección de la escuela o colegio lleva tiempo y discusión entre los padres, que buscan siempre lo mejor para la/el descendiente que más allá de contar con todas las comodidades para aprender bien debe poner también su voluntad necesaria para ilustrarse bien.
Muchos padres se preguntan cómo y qué hacer para que a sus hijos se los eduque bien y ese conocimiento les sea útil no solo para lo que sea empleado sino para su vida. Una que nunca sabemos cuándo ni cómo terminará y nos conviene tener y entender ideas y métodos que nos enseñan desde nuestro hogar, escuela, colegio y universidad. Se ha descubierto que la lectura y actividades numéricas guiadas por padres impactan en el éxito escolar de cualquier niño. Que una persona posea conocimientos fijos en su mente no depende mucho de donde vaya a estudiar sino de donde venga de estudiar.
Aprender a leer
La casa es mucho más que el lugar donde existen nuestras comodidades cómo la habitación, cocina, sanitario, es el espacio adecuado para enseñar bien al hijo o hija. Es ahí donde este pequeño ser humano tendrá las referencias y coordenadas adecuadas para relacionarse bien con el mundo fuera de casa y captar bien cualquier información que se le alcance. Hoy día es algo que sobra en plataformas cómo la red global y lo que se encuentra en este lugar virtual pero que pueden tener serios efectos reales en cualquiera.
Las actividades como leer cuentos desde temprana edad, hablar sobre lo que se ha leído y jugar con palabras están asociadas con mejores resultados en lectura. Los estudiantes que participan en estas actividades tienen una ventaja particular sobre sus pares donde estudien.
Este dato puede servir para esos padres preocupados por la mente de sus hijos que se encuentran bajo riesgo por la inmensa cantidad de información sin filtro que existe en la red. Que puede construir o destruir la vida de quien consuma dicha información. La misma puede ser bien o mal digerida si el lector, oyente o televidente está preparado para asimilar bien lo que se le enseñe.
Por eso organícese y distribuya bien su tiempo no sólo para usted sino para quienes formen parte de su familia, él único equipo de personas que siempre responderá en las buenas y malas, bien o mal de acuerdo a cómo haya sido formado intelectual cómo espiritualmente.
El hablar es algo tan fácil y muy natural cómo la respiración, el ver, escuchar o moverse y no solo tenemos que hablar con nuestro colega, amigo o persona con quien tengamos un compromiso específico, no debemos cómo seres humanos permitir que los dispositivos o compromisos afecten ese ejercicio fundamental para fortalecer la relación entre personas. que existimos no para vivir aislados sino para congregarnos y por ese gregarismo empezar, desarrollar y terminar proyectos colectivos que pueden producir beneficios particulares.

Licenciado en ciencias politicas (UNA), editor, comunicador, productor y editor de contenido creativo para medios de comunicacion e intereses particulares