Diego Domínguez, el cuatro veces ganador del Transchaco nació y creció rodeando de adrenalina, se consolidó con victorias y se encontró convertido en una máquina de carreras.
“Yo disfruto cuanto más complicado esté, cuanto más feo se ponga el terreno es mejor porque la aventura es mayor”
derrapó a máxima velocidad. Una tierra que siempre ofreció más que dificultades, inhóspita que no perdona el más mínimo error, caminos duros con poca influencia del hombre hacen que el Rally del Chaco sea una carrera solo para los aventureros.
Se prepara para girar la llave y encender el motor, ya escucha el rugido potente porque a fines de setiembre arranca la competencia inspirada en el Rally Safari Africano: “una emoción enorme, una aventura tan linda, un tremendo desafío deportivo” son las palabras que retumban en los angostos senderos de las picadas. Pasa a máxima velocidad el Hyundai i20, con su torque de tractor, y antes que desaparezca en un abrir y cerrar de ojos, mientras el cambio secuencial pasa de cuarta a quinta, se sigue percibiendo el sonido de un competidor
“Sin lugar a dudas este rally es el anhelo de cualquier piloto paraguayo”.
Entendible la pasión por esta competencia. Otra prueba especial: acelerador apretado al nivel justo para tener al motor en las revoluciones justas. “Desde pequeño fue un sentimiento especial cruzar en balsa el rio Paraguay para ir al Chaco con mi papá, antes no había puente, lo hacíamos de esa manera. Fue indescriptible haber corrido mi primer Rally del Chaco a los 23 años”. Sentir adrenalina Bandera a cuadros negros y blancos abajo, entra primera, segunda, tercera: “lo que más placer me da es frenar lo más tarde posible”, cuarta: “sentir que no hay posibilidades de frenar y frenar después de eso”, quinta: “cuando era temerario, la verdad era más
divertido”.
Curva peligrosa, dijo la conciencia experimentada disfrazada de copiloto “las responsabilidades y las obligaciones que uno tiene con el equipo y patrocinadores, con la experiencia, la pasión y los conocimientos correctos hacen que uno logre el mejor rendimiento sin arriesgar tanto, como lo hacía cuando era joven”.
“una emoción enorme, una aventura tan linda, un tremendo desafío deportivo”
La meta está cerca, el primer lugar a minutos, todo es posible “con el Hyundai i20, el auto con mejores prestaciones con el que me ha tocado competir”, tercera, cuarta, quinta, acelerador a fondo y simbiosis, la máquina y el hombre se han unido para encarar la cuadragésima sexta edición de esta tradición paraguaya “Tengo la experiencia correcta, la pasión correcta y soy bastante bueno para la presión”. En busca de la quinta victoria a todo motor.
PABLO PEDREDRO
@perreski