La médula ósea se ubica dentro de los huesos y se encarga de producir las células de la sangre. Este tejido es indispensable y las patologías que generan déficits con su funcionamiento son incompatibles con la vida, explicó el doctor Cristobal Frutos, coordinador de Trasplante del Hospital Central de IPS.
De acuerdo a la necesidad, se utilizan diversas clases de trasplante de médula ósea: la alogénica es la que requiere de un donante.
“Por otra parte, están los trasplantes autólogos, que se dan cuando se extrae la médula para guardarla posteriormente en un lugar fuera del cuerpo, mientras se realizan tratamientos como la quimioterapia. En los pacientes con linfoma, se les hace una quimioterapia seis veces más fuerte de lo que aguantaría su médula. Por este motivo, se guarda la médula para que no tenga contacto con la quimioterapia”, mencionó.
En el caso de los trasplantes alogénicos, por ejemplo, los pacientes diagnosticados con leucemia requieren esta clase de procedimientos cuando la quimioterapia no da resultados.
El noble acto de proveer células de la médula ósea puede salvar vidas y, para concretarlo, se utiliza un procedimiento muy similar a la donación de sangre.
“Al hacer el trasplante, ponemos una vacuna, que le hace al cuerpo creer que está infectado, sin que esta sea la realidad. Entonces, se producen muchos glóbulos blancos, esos glóbulos blancos salen de la médula y este ‘exceso’ es lo que se recolecta. Tras la donación, podes hacer tu vida normal. La colecta se hace desde la sangre periférica. Es igual a la donación de sangre”, mencionó.
Durante el 2021, se llevaron a cabo en el país unos 39 trasplantes de médula ósea, de los cuales 29 se realizaron en el Instituto de Previsión Social, según datos proveídos por el coordinador de Trasplante del Hospital Central de IPS.
El trasplante de médula ósea es un procedimiento relativamente nuevo en Paraguay. En febrero de 2017, con una cooperación entre la Clínica Universitaria de Leipzig, Alemania, y nuestro país a través del Instituto de Previsión Social (IPS), se iniciaron contactos para el traspaso de conocimiento y experiencia práctica en el tratamiento.
Debido a esto, recién en el 2019 se formó el registro de donantes de médula en Paraguay.
LARGA LISTA DE ESPERA
Frutos comentó que existe una gran cantidad de pacientes esperando un trasplante de médula ósea, pero esta realidad se debería principalmente a las condiciones de salud que deben poseer los posibles trasplantados para realizarse el procedimiento.
“Los pacientes no es que estén esperando su lugar, sino estar en condiciones. El tiempo máximo que se puede esperar por este procedimiento es de tres meses”, comentó.
Además, una de las aristas más complejas a la hora de desarrollar esta modalidad terapéutica es la compatibilidad entre el donante y el receptor.
“Es muy difícil el trasplante de médula con la compatibilidad. No es tan permisivo. Mientras más compatible sea el donante, mejor será para el paciente”, indicó.
SE PUEDE RECURRIR AL INAT
Para donar, las personas deben ser mayores de 18 años y no poseer afecciones que puedan representar un riesgo para el receptor. En ese sentido, Frutos expresó que los interesados en realizar este noble gesto pueden acudir al Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), ubicado en la calle Capitán José Domingo Lombardo.
“No hay un banco de médula, porque siempre la médula fresca es mejor. Una vez que alguien se acerca al INAT, se les realiza un hisopado en la boca para la prueba de compatibilidad. Este resultado será su código genético personal, que se guarda en una base encriptada y con código. Entonces, el día de mañana aparece una persona que necesita un trasplante y se verifica con esa pista si hay alguien que sea compatible. La donación es anónima”, finalizó el doctor.