Comunicación efectiva en el aula / Félix Martín Giménez Barrios

Como ustedes sabrán, la educación no se trata solo de enseñar materias útiles, sino
también de lograr que los estudiantes comprendan y retengan los conocimientos
adquiridos. Por ello, la capacidad del docente para comunicarse efectivamente dentro
y fuera del aula es clave. Gracias a estas habilidades en el habla e incluso en el
lenguaje corporal y escrito, se mejora la calidad de las instrucciones.

Sin una comunicación clara, ni el profesor más inteligente en su respectivo campo,
logrará inspirar a sus alumnos. Solo una comunicación eficaz garantiza que cualquier
lección se imparta con claridad. Un buen ejemplo es el uso de un lenguaje sencillo,
uso de recursos visuales y la comprobación de la comprensión por parte de los
profesores que ayudan a sus alumnos a captar las ideas y los conceptos clave.

Cuando tanto las instrucciones como las explicaciones son precisas, los estudiantes
dedican menos tiempo a comprender que se espera de ellos, por lo que tiene más
tiempo para concentrarse en la idea principal de la actividad a desarrollar. El objetivo
principal de la enseñanza es el éxito del alumnado, la comunicación es solo una de las
armas que los docentes tienen a su favor. Los profesores que brindan
retroalimentación práctica durante las lecciones ayudan a empoderar a los alumnos.

No debemos olvidar que el estilo de comunicación de un docente también moldea la
cultura educativa en el aula. Cuando la clase comprende su progreso y como mejoran
cada día, comprenden su valor y se convierten en personas motivadas y seguras. La
comunicación respetuosa y las reseñas adecuadas generan confianza en el ámbito
académico y los mejores docentes lo saben muy bien.

En resumen, la comunicación eficaz es fundamental para la enseñanza exitosa. Los
docentes que dominan el arte de la compresión clara, la escucha activa y la
interacción empática, crean un ambiente de aprendizaje donde los estudiantes se
sienten apoyados. Al fin y al cabo, cuando un docente sabe comunicarse eficazmente,
los alumnos no solo aprenden, sino que prosperan.