Luego del cuádruple asesinato en Pedro Juan Caballero, se allanó ayer el penal de dicha ciudad. Debido a que sindicaron a uno de los reos, identificado como Faustino Ramón Aguayo, quien se encuentra preso por narcotráfico, como presunto autor moral del hecho.
Durante el allanamiento, el Ministerio Público descubrió que Aguayo vivía en una lujosa celda y al momento del procedimiento, se encontraba en compañía de una mujer, llamada Mirna Lesme. Radio Ñandutí informó que en el cuarto se encontró una smart TV, aire acondicionado, un sommier, una colección de gorras, una mesa de villar, celulares y un autito a batería.
Aguayo es presunto cerebro de un esquema de narcotráfico y en 2021 se entregó a la Justicia, luego de la incautación dos años antes de cargas de cocaína de tres toneladas.
CIERRE DE LA PENITENCIARÍA
Debido al hallazgo, el ministerio de Justicia decretó el cierre de la penitenciaría de Pedro Juan Caballero para nuevos internos.
Funcionarios de esa cárcel, con una población de 865 presos, ya habían sido apartados del cargo tras la fuga el pasado año de 76 internos, en su mayoría integrantes del Primer Comando Capital (PCC), el principal grupo criminal brasileño.
La ministra de Justicia, Cecilia Pérez, dijo que el cierre implica la intervención por 30 días del centro y la investigación administrativa y penal a la dirección del mismo.
Con base en la medida quedan suspendidos los ingresos de nuevos reos y las visitas, mientras se ultima el plan para la reubicación en otras cárceles del país de reclusos relacionados con condenas por narcotráfico, tráfico de armas y lazos con el crimen organizado, explicó Pérez en rueda de prensa.
«Vamos a dejar a la mitad de la población en el penal de Pedro Juan Caballero», dijo la ministra, quien añadió que espera que en periodo no muy largo se cierre definitivamente.
El anuncio se hizo tras el allanamiento de la celda de Faustino Aguayo, presunto cerebro de un esquema de tráfico de narcotráfico que en mayo de este año se entregó a las autoridades, luego de la incautación en 2019 de cargas de cocaína que sumaron tres toneladas, según el informe de la Secretaria Nacional Antidrogas (Senad).
Igualmente, se resolvió que habrá una intervención de la mano de Sixto Peralta, director del penal de Ciudad del Este, que durará inicialmente por 30 días, y deberá presentar un informe al término del proceso. Asimismo, fue apartado de sus funciones el director interino Virgilio Duarte, quedando a disposición de Establecimientos Penitenciarios.
“Vamos a informar de todo esto a los organismos de justicia y trasladar a todas las personas que tengan hechos punibles vinculados al crimen organizado, narcotráfico, por tráfico de armas o que pertenezcan a cualquier grupo vinculado al crimen organizado”, detalló. Los internos serán distribuidos en distintos centros de reclusión, indicó.
La secretaria de Estado expuso que no pueden cerrar completamente el penal debido a que el sistema de por sí ya se encuentra saturado, por lo que el plan se deberá impulsar de manera gradual.
“Esperemos que en un periodo no tan largo podamos cerrar el penal y construir otro, en otro lugar que cubra las necesidades judiciales de esa circunscripción”, declaró.
Finalmente, la ministra afirmó que todos los funcionarios de la penitenciaría están actualmente bajo investigación y en la fecha se conformó una comisión que va a recorrer e inspeccionar las condiciones de las 18 penitenciarías del país.
NO TENDRÍA QUE HABER ESTADO EN PJC
El juez penal de garantías, Mirko Valinotti, en comunicación con radio Ñandutí, expresó que los abogados de Faustino Aguayo habrían presentado certificados médicos en lo que alegaban que el recluso sufre de cardiopatía y su médico tratante es de la ciudad de Pedro Juan Caballero, por eso ordenó el traslado a ese penal.
“En el marco de la causa, se decidió el 27 de mayo decretar la prisión del mismo y ordenar la remisión a la Penitenciaría de Pedro Juan Caballero. Presentaron certificados médicos que avalan una afección coronaria que padece el señor, intervenciones quirúrgicas y ceguera en uno de sus ojos a causa de la cardiopatía”, afirmó Valinotti.
LA VIOLENCIA NO CESA
La ciudad de Pedro Juan Caballero vive asediada desde hace años por la violencia del narcotráfico. El último episodio dramático fue el asesinato el sábado, y desde ese momento se la catalogó como la urbe como la «Sinaloa» de Paraguay.
En un punto estratégico para el narcotráfico por ser fronteriza con Brasil, la capital de Amambay volvió este jueves a la actualidad con la orden de clausura de la prisión, y una gran presencia de cabecillas del Primer Comando de la Capital (PCC), el mayor grupo criminal brasileño.
