California esponde a Trump

Estados Unidos es un país de 9.867 millones de km², compuesto por 50 estados, en dicho país habitan 340,1 millones de personas que hablan inglés, español, chino, francés, alemán, ruso y la lengua que sirva para comunicar a una comunidad de personas en particular. Uno de esos estados es California, conocido porqué allí existen Hollywood, Silicon Valley y otros sitios populares del importante Estado que una vez ayer quiso salir de la unión de estados con el nombre de “Calexit”, emulando a Inglaterra y su salida de la Unión Europea bajo el titulo de “Brexit”. El mismo , i fuera un país sería la novena economía del mundo. 

Hace poco en el Estado dorado se dieron  intensas manifestaciones desarrolladas por su población  impulsadas principalmente por redadas y operaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ordenadas por la administración Trump. Por ejemplo, el 8 de junio de 2025, se reportó que cerca de 6,000 personas estaban participando en las manifestaciones, y de ese grupo, 2,000 tomaron la Ruta 101 que conecta San Diego con la frontera de Oregón, pasando por la costa oeste del estado. 

En  California  se estima que su población supera los 39 millones de personas y está formada por nativos estadounidenses, cómo asiáticos, africanos, europeos y latinoamericanos desde hace tiempo. Es un Estado que presenta muy bien al país crisol o melting pot que es los EE.UU por estar compuesto por una población hecha en base a la mezcla de culturas, identidades y orígenes de distintas partes del mundo. 

Uno que siempre tuvo y tendrá seres humanos si creamos medidas de seguridad y fortalecemos un fuerte espíritu de comunidad que nos dé invulnerabilidad a dilemas que surjan de la nada donde y cuando sea y puedan dañarnos o perjudicar a nuestros seres queridos en cualquier ciudad, país o continente que ahora quizá de manera tardía nos damos cuenta que en el mundo todo o todos estamos ligados de alguna forma el uno con el otro y debemos atendernos, asociarnos y cuidarnos mutuamente para evitar disturbios cómo los que dieron en la tierra del “orgulloso y valiente”. 

Fuertes represiones

Las redadas también formaron parte de un esfuerzo más amplio de la administración Trump para intensificar la aplicación de las leyes de inmigración y llevar a cabo lo que ha llamado la «mayor operación de deportación» en la historia de Estados Unidos.Esto ha generado miedo y enojo entre los residentes y defensores de los inmigrantes.

En respuesta a las protestas, el presidente Trump ordenó el despliegue de miles de tropas de la Guardia Nacional y cientos de Marines activos en Los Ángeles. Esta medida fue fuertemente criticada por el gobernador de California, Gavin Newsom, y la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass quienes  habitualmente cómo cualquier administrador público se limitaron a observar lo transmitido por medios de comunicación desde sus oficinas observando lo que transmitían los medios de comunicación y los vivos desarrollados por los manifestantes en las redes sociales que quizá van reemplazando a los tradicionales medios de comunicación y volviendo periodistas al ciudadano presente en el momento y sitio en el que se desarrolle algo en particular.

Los manifestantes y defensores argumentan que a las personas detenidas se les están negando sus derechos al debido proceso y que las tácticas del gobierno federal están sembrando terror en las comunidades. La alcaldesa Bass afirmó que estas tácticas «siembran terror en nuestras comunidades y alteran los principios básicos de seguridad en nuestra ciudad», que alberga a más de 3 millones de personas en una geografía de 1,210 kilómetros cuadrados. Ya pueden hacerse una idea del tamaño de esta ciudad donde se dió esta importante manifestación