La selección brasileña realizó su primer entrenamiento para los partidos con Chile y Bolivia por las eliminatorias del Mundial de Catar 2022 con sólo ocho jugadores en la cancha y a la espera de la llegada de los otros 14 convocados.
A sólo tres días del partido con Chile en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, los únicos diez jugadores de la Canarinha que se han presentado hasta ahora en la concentración participaron en una primera práctica, que se limitó a trabajos regenerativos en el gimnasio para dos de los convocados.
El zaguero Thiago Silva (Chelsea) y el delantero Gabriel Martinelli (Arsenal) ni llegaron a pisar la cancha debido a que llegaron cansados a la concentración brasileña tras sus respectivos partidos del fin de semana por la Liga inglesa.
De los ocho restantes, tan sólo seis realizaron trabajos con el balón debido a que el atacante Richarlison (Everton) y el centrocampista Philippe Coutinho (Aston Villa) se entrenaron aparte y limitaron la práctica a algunas carreras y ejercicios.
En la primera práctica comandada por el seleccionador brasileño, Adenor Leonardo Bachi «Tite», tan sólo participaron el portero Weverton (Palmeiras), los defensas Alex Telles (Manchester United), Felipe (Atlético de Madrid) y Guilherme Arana (Atlético Mineiro) y los centrocampistas Fred (Manchester United) y Bruno Guimaraes (Newcastle).
Con tan pocos jugadores a disposición, Tite se limitó a guiar a sus pupilos en unas entrenamientos de toque, cruces y finalizaciones.
Brasil tan sólo realizará su primer entrenamiento con el equipo completo en la tarde del martes, para cuando es esperada la llegada de los demás convocados, incluyendo Neymar (PSG), que vuelve al equipo tras haberse perdido los últimos partidos por lesión.
Brasil se entrenará hasta el miércoles en le Granja Comary, el moderno centro de entrenamiento que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) tiene en la ciudad serrana de Teresópolis, a unos 60 kilómetros de Río de Janeiro.
El equipo se desplazará el propio miércoles a Río de Janeiro para su partido del jueves con Chile en el Maracaná.
Será el último partido de Brasil por las eliminatorias como local y, tras el fin de todas las restricciones impuestas para prevenir la pandemia de la covid, el estadio fue liberado en su totalidad y se espera la venta de las 70.000 entradas puestas a la venta.
Richarlison, en una rueda de prensa virtual este lunes, admitió que Brasil considera a la selección chilena como peligrosa, porque el jueves se juega su clasificación, y que por eso espera el apoyo de la afición en el Maracaná.
La selección brasileña regresará a la Granja Comary tras el partido con Chile y seguirá allí su preparación hasta el lunes, cuando viajará a Bolivia para el partido del martes en La Paz.
Las únicas novedades en la lista de convocados en la última semana fueron la inclusión de Felipe para sustituir a Gabriel Magalhaes, zaguero del Arsenal inglés que pidió licencia debido a que su mujer dará a luz su primera hija esta semana, y la desconvocatoria el delantero Raphinha, del Leeds United inglés y quien dio positivo de coronavirus y no pudo viajar a Brasil.
Además, la comisión técnica anunció la desconvocatoria del portero Éderson (Manchester City) debido a que los médicos le diagnosticaron una gastroenteritis, y su sustitución por Everson, portero del Atlético Mineiro.
Brasil, que ya tiene asegurado su billete a Catar, es líder invicto de las eliminatorias sudamericanas, con 39 puntos, y tiene un balance casi perfecto de doce victorias y tres empates. EFE
