En la mañana del miércoles las autoridades penitenciarias abortaron el presunto plan de fuga que estaban tramando los miembros del cartel paulista Primer Comando Capital (PCC) que se encuentran recluidos en la Penitenciaría Regional de Encarnación – Centro de Rehabilitación Social (CERESO), ubicada en el distrito de Cambyretá, departamento de Itapúa.
Esta unidad penitenciaria de mediana seguridad tiene albergado a aproximadamente 130 miembros de la organización criminal de origen brasileña, con tentáculos desde hace varias décadas en nuestro país. La ministra de Justicia, Cecilia Pérez Rivas, explicó que los integrantes de esta facción se encuentran en un pabellón diferenciado.
Desde la cartera estatal informaron que gracias a un trabajo coordinado entre la Policía Nacional, el Ministerio Público y la Unidad de Inteligencia Penitenciaria del Ministerio de Justicia, se lograron recabar informes de inteligencia sobre el presunto plan de fuga.
También tuvieron en cuenta algunos indicios como rajaduras en las estructuras del pabellón, como así también la humedad que había en uno de los sectores. La ministra de Justicia confirmó que desde que recibieron la información de inteligencia, hace poco más de una semana, los guardias del penal empezaron a realizar revisiones más intensas, además de las requisas.
Finalmente la inspección general que se llevó adelante en la mañana del miércoles en Cereso culminó con el hallazgo de un túnel que se encontraba en una fase inicial de excavación.
En el lugar se encontraron palas caseras que estaban siendo utilizadas por las personas privadas de libertad para realizar el pozo, y ya habían logrado llegar a unos tres metros de profundidad, pero no realizaron aún el codo hacia otro sector.
“Encontramos en la esquina de una celda. Estaban comenzando a cavar, y el tunel había expedido agua evitando que avancen más, y además el suelo en Cambyretá tiene mucha piedra y hay que cavar muy profundo para poder avanzar hacia otro sentido”, comentó Pérez Rivas.
OBJETIVOS
Los miembros del Primer Comando Capital siempre mantienen en alerta a las autoridades, porque la facción criminal periódicamente monta planes que tienen como objetivo la fuga de sus miembros de lugares de reclusión. Al mirar la historia delictiva de este país encontramos, fugas, toma de rehenes, amotinamientos con sangrientas matanzas, operativos de rescate, entre otros.
Y es por todo esto que la ministra de Justicia indica que en los centros penitenciarios donde hay integrantes del cartel paulista se deben de mantener los ojos bien abiertos.
En cuanto la hipótesis de la dirección que tomaría el pozo que estaban montando en Cereso, inteligencia tiene dos presunciones sobre el destino que tomaría el túnel, que fue abortado tras la intervención de agentes penitenciarios, policías del Departamento Contra el Crimen Organizado y el Ministerio Público.
Los datos de inteligencia no descartan que el objetivo era doblar el túnel para tener una salida hacia el monte. Sin embargo, esto podría ser más riesgoso para los delincuentes porque en las afueras se tienen a contingentes militares y policiales cuidando el perímetro.
Por otro lado, fuentes de inteligencia también señalan que el plan habría sido doblar el túnel hacia el patio común del Cereso, e iniciar una especie de motín con toma de rehenes para lograr una fuga masiva del recinto penitenciario.
HAY PARAGUAYOS DENTRO
La ministra de Justicia, Cecilia Pérez Rivas, volvió a insistir en que el Primer Comando Capital (PCC), aunque sea un cartel originario del estado de São Paulo, Brasil, no solamente tiene dentro de su estructura a personas de nacionalidad brasileña, sino que incluso hay habría paraguayos con rangos altos dentro de la organización.
Es que los criminales llevan años “bautizando” a paraguayos para que formen parte del PCC, y aunque en un principio algunos ingresaron simplemente con soldados, con el tiempo los paraguayos bautizados fueron tomando lugares de importancia en la organización, aunque en general los principales jefes siguen siendo extranjeros.
Y un dato no menor a tener en cuenta es que el principal enemigo del PCC dentro del sistema penitenciario paraguayo dejó de ser la organización carioca Comando Vermelho (CV), y pasó a ser el Clan Rotela, liderado por el Zar del Microtráfico, Armando Javier Rotela.
El Clan Rotela y el PCC han protagonizado cruces macabros en los últimos años dentro de las penitenciarías paraguayas, además de jugarse el control de ilícitos, esta banda obstaculiza el bautismo a gran escala de los brasileños.
CIFRAS
130 miembros del Primer Comando Capital hay en el pabellón diferenciado del Cereso donde se estaba cavando un túnel.