POR BENJAMÍN FERNÁNDEZ BOGADO
IPS EN CUASI QUIEBRA
El IPS afirma que está casi quebrado y que va a necesitar una gran reingeniería, entre cuyas medidas se incluiría el aumento del aporte obrero-patronal. Esa es la única manera que, dicen desde adentro, podrán salvar a la institución, que tiene un acreedor extraordinariamente importante: el Estado paraguayo, que es el que coloca a su titular y a los consejeros.
El mayor moroso del IPS es el Estado, que debe más de 600 millones de dólares de aportes que no ha hecho en los últimos años, y es el que determina la conducción del ente. Es poco probable que le pidan al Estado paraguayo que cumpla con su obligación de pagar sus acreencias, y encuentran que sea mucho más fácil hacer que el patrón y el empleado carguen las consecuencias de malas administraciones recurrentes. No hemos visto que ningún titular del IPS haya sido sancionado en términos judiciales, cuando la corrupción interna es impresionante: desde la compra de medicamentos e instrumentales médicos, pasando por cuestiones que tienen que ver con la jubilación misma, siempre han mostrado el lado lacerante de la previsional, que muchos temen pueda caer, y que varios que se encuentran jubilados por el sistema no puedan cobrar.
Aquí lo que habría que hacer es recuperar todas las acreencias del IPS y, entre ellas, la primera del Estado paraguayo.
REZAGADOS VIALES
Las cuestiones que tienen que ver con el desarrollo vial paraguayo hablan de una inversión cercana a los 15 mil millones de dólares que necesita el Paraguay para estar a tono con lo que la región tiene en términos de desarrollo de carreteras.
El viaje reciente que realicé desde Asunción a Mariscal Estigarribia muestra el excelente estado en que se encuentra la ruta Transchaco, empezando desde Cerrito hasta esta localidad cercana a Asunción. La situación es muy mala y necesita una urgente intervención del Ministerio de Obras Públicas. Posteriormente, el tramo construido hasta Mariscal Estigarribia es impecable.
Si pudiéramos tener carreteras de este tipo a lo largo de todo el Paraguay, indudablemente el desarrollo sería mucho más propicio. Pero hay que pensar también en el desarrollo de otras fuentes alternativas de locomoción y de transportación, como el tren y el tranvía.
Nosotros no estamos haciendo dicha tarea y tampoco hemos reglamentado la Ley de Transporte recientemente aprobada, para que sea eficaz y permita la electromovilidad, en lo que Chile tiene un bien ganado prestigio y una experiencia que podría aportarse al Paraguay.
Muchas de estas cuestiones son importantes. No somos un país tan extenso; sin embargo, el transporte desde un punto a otro de 200 kilómetros, en las condiciones actuales, puede llevar más de cinco horas.
ABRIRSE AL MUNDO
Una de las cuestiones importantes que el Paraguay tendría que trabajar profundamente es hacer que su vinculación con el mundo sea lo más abierta posible. Ahora hay una discusión en torno al viaje de unos diputados cartistas a China, cuando eso tendría que ser parte de una estrategia país que podría incluso ser usada para sacarle mayor provecho a la relación con Taiwán. Sin embargo, la persecución que ha desatado el cartismo contra el diputado Mesa, quien había sido integrante del grupo de Abdo y se había pasado posteriormente al cartismo, demuestra que no tenemos una mirada estratégica con respecto al comercio.
Justamente ahora que se están levantando muros, el Paraguay tendría que abrirse al mundo y no aliarse con los actores del proteccionismo, tantas veces cuestionado por los grandes actores económicos mundiales, y que ahora nos deja en la perplejidad sin saber qué hacer. Estados Unidos también se ha opuesto de manera terminante a que Naciones Unidas establezca un impuesto al carbono, y sobre eso el Paraguay había dicho con anterioridad que estaba de acuerdo. Veremos qué posición tiene Paraguay después de este acercamiento carnal a los Estados Unidos.
En concreto, un país más abierto, más integrado al mundo, para una nación mediterránea como la nuestra, es una cuestión no solamente necesaria y urgente, sino también de propia sobrevivencia.
Periodista Senior