POR: BENJAMÍN FERNÁNDEZ BOGADO
LA ECONOMÍA DE VERDAD
Una de las cuestiones más importantes desde el punto de vista de la honestidad intelectual es especialmente ser riguroso con los números, y eso no está ocurriendo en el gobierno de los economistas. Nos están diciendo que hay un déficit fiscal del 1.9, pero no cargan todas las deudas acumuladas al interior del propio Estado con el argumento de que todavía no están contabilizadas.
Cuando eso acontezca, pues probablemente el déficit nuestro no será de 1.9, como repite una y otra vez el ministro de Economía, sino que será superior a 4. Cuando asumió este gobierno, el propio Fernández Valdovino dijo que lo que nos dejó Abdo Benítez es muy superior a lo que dicen los números, y había afirmado que en el año 2024 tendrían que hacer frente a una serie de compromisos porque hay deudas que no fueron contabilizadas.
En aquella oportunidad, Fernández Valdovino dijo que no era honesto, desde el punto de vista del manejo de las finanzas públicas, no haber incluido estos números.
Es lo mismo que podríamos aplicarle a él y al gobierno de Peña en este momento, y lo podríamos calificar con sus propios términos: deshonestidad en el manejo de la cosa pública el no tener que colocar las acreencias que tiene el Estado, que son superiores a 1.300 millones de dólares. Con el argumento de que le falta un sello o una firma no significa que la deuda no exista.
Puede dejar de existir en términos contables, pero en la realidad, que es la única verdad, está allí y recuerda permanentemente que algo está haciendo mal en materia económica este gobierno, que no logra pagar ni sus acreencias más elementales.
APRENDER A VOTAR
La política es la construcción de los anhelos y sueños de una colectividad; de ahí que las promesas electorales son fundamentales a la hora de conseguir los votos primero y luego gobernar con ellos. Aquella expresión del gobierno de “vamos a estar mejor”, por ejemplo, no se compadece con la realidad de millones de paraguayos que están en situación de pobreza, de marginalidad, que no les alcanza el dinero y que todos los días se reafirman a sí mismos que no están mejor.
Esto tendría que también llevarse a escala de los candidatos a intendentes municipales del próximo año, en que tendremos comicios y en donde escucharemos una serie de estas promesas, en las cuales tendríamos que demandar y exigir que se reduzcan a no más de dos o tres, pero que se lleven adelante con la gente realmente adecuada para dicho propósito.
Muchas de las mentiras en campaña se deben fundamentalmente a que no tiene el elector, el votante, el que elige, una idea de lo que realmente espera de la política y de sus políticos; y estos últimos han banalizado tanto la política que ha dejado de tener una idea de mejoramiento de la calidad de vida para millones de paraguayos.
UN PRESIDENTE ACORRALADO
La situación del presidente Trump en los Estados Unidos con los archivos de Einstein es cada vez más complicada, debido a que fueron filtrados varios correos electrónicos del que montó toda una red de pedofilia alrededor de personajes importantes de la sociedad de ese país.
Ahora ha tenido que reunirse en el Situation Room de la Casa Blanca para tratar de enfrentar lo que parece, con el voto de los republicanos, una luz de acusaciones que podría colocarlo en una situación cada vez más compleja. Incluso algunos republicanos dicen que tendría que ser llevado a juicio político.
Trump responde que eso se tiene que ver más con cuestiones electorales, con cuestiones políticas y no con la realidad, afirmando que, como le dobló el brazo a los demócratas reabriendo el gobierno, ahora le están buscando argumentos de este tipo para menoscabar su legado. Ciertamente estos no son temas nuevos; aparecieron
ya en tiempos de campaña y han sido ventilados incluso en los tribunales, pero nunca con las evidencias que ahora sí se han presentado y que demuestran que se podría concluir en algún momento que Trump ha sido un pedófilo.
Periodista Senior