sábado, octubre 25

3×3 (03/09/25)

POR BENJAMÍN FERNÁNDEZ BOGADO

UN JUEZ DE JUECES SIN TOGA NI TÍTULO

La visión más prostituida de la justicia paraguaya es la que hemos tenido hasta ahora y que hemos incluso sobrepasado todos los parámetros éticos que podrían imaginarse. Cuando un senador como Hernán Rivas, que nunca fue a ninguna facultad de derecho y que está obligado por ley, si pretende ser miembro del Consejo de la Magistratura o del Jurado de Enjuiciamiento, tenga que tener el título de abogado y ejerció el cargo.
Pues bien, ahora la Fiscalía ha imputado y ha pedido sanción para el senador Rivas, que llegó a ser el juez de los jueces, llegó a ser el presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y luego de una fuerte presión que realizó la exsenadora Katia González y que le llevó a ella a tener que cargarse posteriormente su expulsión del Senado, ahora se muestra claramente que ella tenía razón y que la defensa que escribieron los cartistas a uno de ellos era absolutamente sin fundamento y gravosa. No solamente que ninguno de sus compañeros de una universidad llamada Sudamericana y que abría puertas en Luque lo había visto jamás pasar por dicha universidad. Hay que recordar que Hernán Rivas es desde una población de Itapúa denominada María Auxiliadora que se encuentra a más de 360 kilómetros de Luque, a donde jamás asistió por supuesto de forma diaria a las clases de derecho.

Hernán Rivas debe ser sancionado de manera ejemplar, se burló no solo de la justicia, no solo de los jueces, de los fiscales, se burló de cada uno de los paraguayos. Ojalá la acusación fiscal encuentre algún juez que tenga los valores bien puestos para corregir esto que ha sido una bofetada para todos.

CAMBIOS ADMINISTRATIVOS SIN RESULTADOS

Las manifestaciones de los sectores eléctricos y de transporte sobre temas que tienen que ver con cuestiones legales han llevado a que se tenga que posponer algo que no tiene un fundamento claro ni explica qué razón existe detrás de la concentración de viceministerios en ministerios ya establecidos. Algunos incluso como el de Turismo pierde su estatus de ministerio y pasa a ser simplemente una dirección más del Ministerio de Industria y Comercio. Es aparentemente una jugada de Peña para potenciar la figura de su amigo el Ministro de Industria y Comercio.

Pero con eso no funcionan las cosas en términos administrativos de manera correcta. Hemos tenido ya el caso de haberse juntado dos ministerios, el de Comunicación y de Tecnología, porque así lo pedía el amigo de Mario Abdo Benítez para ocupar el cargo. Finalmente ninguna de las dos reparticiones ha funcionado como debiera hasta ahora. Ni comunica ni hace las tareas de cambios tecnológicos que el país necesita. Y pasa una cosa igual también con el tema del transporte que ahora por la huelga anunciada de choferes han tenido que posponer de nuevo el planteo de la Ley del Transporte que sigue siendo una cuestión que dice el gobierno cambiará por completo la ecuación del sistema. Pero pareciera que algunos de los actores de este proceso, los choferes, no fueron convidados a eso.

Y los sindicatos de la ANDE también creen que pasando el Viceministerio de Minas y Energía bajo el control del Ministerio de Industria no habrá tenido sentido para nada la autonomía y la capacidad de administrar el sector como ha venido haciendo la ANDE desde su creación.
En concreto, mucha confusión, falta de claridad y, por sobre todo, una idea de lo que deben hacer estas reparticiones es lo que más abunda.

CONCEJALES COMO CORRESPONSABLES Y CÓMPLICES

Las cuestiones municipales se vuelven a estar en el tapete ahora con mayor énfasis haciendo subrayado del rol que tienen los concejales en las administraciones ejecutivas. Cada vez se pone más la lupa y los reflectores sobre cada uno de los concejales que aprueban balances, que están de acuerdo con empréstitos, que son mal administrados, que no controlan los recursos, que se llenan también de una masa clientelar que infla el costo del mantenimiento de un municipio y es algo que tiene que ser corregido. Estamos cerca de comicios municipales y tendría que plantearse desde el punto de vista legal en el ámbito del Poder Legislativo y también en la administración de las ordenanzas mayores responsabilidades para los concejales.

No es de recibo aquello de “bueno, nosotros le aprobamos y que haga el intendente lo que tenga que hacer y que asuma él las consecuencias de haber hecho mal uso de esos recursos”. Eso no es suficiente. Con eso no estamos acabando la irresponsabilidad en el manejo de los recursos que tanto daño han venido haciendo a los municipios a lo largo y ancho del país.
Tenemos más de 250 de ellos y en la mayoría, por no decir en todos esos municipios, se repite la misma historia que ha llevado a la bancarrota Asunción.