Seguramente viste o escuchaste sobre la comedia Virgen a los 40. Debes saber que no es pura ficción, es más común de lo que se cree, aun en una sociedad donde el sexo está tan presente como esta, pero iniciar las relaciones sexuales cuando pasas los 30 o 40 años, en ocasiones trae miedos, frustración, inseguridades, pero sobre todo, baja autoestima.
En la sociedad actual se le da importancia a estos temas en la pubertad, y si pasan los años y aún seguís virgen, se genera una cierta presión que luego derivará en vergüenza. La persona puede sentirse fuera de la norma, que le falta algo por lograr.
Este tema ha sido tratado en las diferentes charlas y redes sociales de la reconocida sexóloga transfeminista argentina, Carolina Meloni. La educadora sexual afirma que en una relación paradójica (o no) con la demanda de los tiempos que corren, cada vez son más las consultas respecto al conflicto que genera tener un inicio tardío en las prácticas sexuales, más específicamente, en la penetración.
“La ansiedad que produce la exigencia de un desempeño sobresaliente a nivel sexual es tan alta que termina traduciéndose en temor, terror a veces. Es muy común que posterguemos el encuentro cada vez que se nos presenta la oportunidad, y cuanto más evitamos, más reforzamos la idea de que el sexo es algo enorme, tremendo, inalcanzable, y cada vez le tememos más”, explicó la especialista.
Es importante desde pequeños recibir una buena educación sexual para evitar problemas futuros, además, es esencial tenerla presente a cualquier edad. Pero, ¿qué es un inicio tardío? ¿a qué edad es tarde para empezar a tener sexo?
Según la educadora sexual, hay que pensar lo “tarde” en relación al momento en el que sentimos deseo, la sensación de no poder acercarse a eso que tenemos ganas de hacer, postergarlo cada vez que se nos hace cuerpo la posibilidad del evento. Eso podría ser “tarde”.
Meloni explica que para colmo de males, cuando por fin tiene un acercamiento (muchas veces forzado), se llena de dificultades y malestares, junto con los consecuentes lamentos y autorreproches al momento posterior.
“Acércate cuando podés, si querés, y si no querés hacerlo, no sucede nunca, y fin. No hay una primera vez con un performance de excelencia. ¿Sabes por qué? porque la primera vez no sé a quién tengo enfrente. No somos más experimentados por tener muchos encuentros sexuales, cada vez que conozco a alguien es nuestra primera vez el primer encuentro sexual es una oportunidad para aprender juntos”, concluyó la reconocida sexóloga.
Algunos consejos para iniciarte en la vida sexual pasado los 30 años.
-Lo normal es iniciarse de un modo natural, sin prejuicios y como parte de un proceso biológico y vital. Habría que olvidarse de juzgar y, peor aún, venerar a la mujer por virgen o por promiscua, según lo señala el diario español El Mundo
-La experiencia no significa siempre sabiduría, sino más bien el nombre que damos a nuestros errores. Muchos jóvenes se lanzan a experiencias diferentes y luego se presentan como puros zotes porque no han hecho un aprendizaje real.
-No olvidar que precipitarse a perder la virginidad por considerarla un elemento negativo en nuestro currículum vital implica un riesgo grave para nuestra salud física, si no tomamos las medidas de prevención adecuadas, y también para nuestra autoestima.
-Es importante estrenarse con alguien a quien se desea y con quien haya complicidad. No valen excusas del tipo «porque le gusto», «me lo ha pedido» o «no tengo a nadie mejor y se me pasa el tiempo».
-En esa primera vez habrá nervios e inseguridad, pero lo que no está permitido es poner expectativas muy altas y estándares propios de la comedia romántica.