En la naturaleza humana es normal que nos movamos de una habitación a otra en la casa, trabajo, escuela o el que compartamos con otras personas.
Así y todo la elevada migración o éxodo de personas de un país a otro es algo común de muchos en el planeta, uno que va registrando importantes cifras de personas que se desplazan en busca de trabajo o de nuevas oportunidades económicas, para reunirse con sus familiares o para estudiar. Otros se van para escapar de conflictos, persecuciones, del terrorismo o de violaciones o abusos de sus derechos humanos.
Por este motivo el papa Francisco se reveló en un escrito en el que expone ideas que los gobiernos deben tener en cuenta para poder regular sus niveles de migración y hacer a su vez un buen uso de la población que decida quedarse en casa.
El obispo dice que se debe acoger, proteger, promover e integrar a migrantes y refugiados con actividades que los tengan ocupados física y mentalmente para que sus buenas ideas no terminen emigrando de sus cráneos y sirvan para empezar, desarrollar o acompañar proyectos para el colectivo.
Uno que quizá por la reducción de su población termine por cambiar su título por “particular”. Que no justifica deportes cómo el fútbol, volley, handball, hockey o lo que implique la participación de muchos en cualquier competencia. Cómo es la vida misma donde el mejor equipo que existe por naturaleza es la familia.
Que a su vez es un grupo de personas que se va debilitando e incapaz de controlar la actividad o movimiento de sus integrantes que pueden terminar en campos minados o riesgosos sin compañía o la confianza que genere la posibilidad de abrirse para con el compañero y revelarle sus intenciones, deseos o motivaciones ante cualquier peligro y porque creería que esa sería una solución. El papa destacó la frase “derecho a no migrar” tras el rezo del Ángelus dominical en el Vaticano y por la Jornada Mundial del Migrante.
Paraguay tiene, según los últimos datos publicados por la ONU, 896.484 de emigrantes, lo que supone un 2,34% de la población de Paraguay. Aunque otra sea la realidad percibida al estar fuera de nuestro hogar, consumir noticias y opiniones al respecto en encuentros sociales que presentan que de entre 5 personas en el círculo 3 ya se han quedado sin tíos, primos, hermanos y hasta padres por la oferta que presenta el emigrar o cambiar el lugar de residencia.
Que es una de las consecuencias de una crisis que está en manos del ser humano controlar y adecuarla para el bien común que es la crisis económica y política
