miércoles, octubre 15

Suspenden huelga de transporte y abren espacio para incorporar demandas de choferes

El Ministerio de Trabajo anunció este miércoles que quedó sin efecto la huelga convocada por sindicatos del transporte público para los días 25 y 26 de septiembre, luego de un acuerdo alcanzado mediante un proceso de diálogo interinstitucional. El viceministro de Trabajo, César Segovia, explicó que la negociación se amplió con la participación de la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, así como de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.

“Fue un trabajo conjunto que permitió abrir un espacio de confianza y dar una salida institucional a las demandas de los trabajadores”, señaló Segovia, luego de finalizar la reunión.

Los sindicatos denunciaban que no fueron convocados al debate para modificar la Reforma Nacional de Transporte por lo que el punto central del entendimiento consistió en que las propuestas gremiales serán incorporadas al debate sobre la reforma del transporte público, actualmente en discusión en el Congreso.

Los planteamientos de la Federación de Trabajadores del Transporte (FETRAT) y la Federación Unitaria de Trabajadores del Transporte (FUTT) fueron no quedar al margen del proceso de modernización del sector.

Los choferes remarcaron que la suspensión de la huelga busca “no perjudicar a los usuarios” mientras continúe la discusión de fondo. El acuerdo fue rubricado en la sede ministerial con la presencia del viceministro de Transporte, Emiliano Fernández y los representantes sindicales, quienes valoraron la apertura al diálogo.

«No queremos la huelga»

“Vamos a demostrar que no queremos la huelga, sino que una reforma para el bien común y un servicio eficiente, tanto para los usuarios, como para trabajadores y empresarios”, expresó Gerardo Giménez, vocero de la Federación de Trabajadores de Transporte (Fetrat).

De esta manera se garantiza la continuidad del servicio para miles de pasajeros que dependen diariamente del transporte público, evitando un paro que habría tenido fuerte impacto en la movilidad urbana y en la economía cotidiana. El viceministro de Transporte subrayó que en todo el proceso de negociación la prioridad fue garantizar el bienestar de la ciudadanía.

«En estas conversaciones primó el bienestar ciudadano y eso nunca debemos perder de vista. Quizás eso nos lleva a soluciones donde se impone el interés general. Agradezco el espíritu de diálogo de los choferes porque sabemos que estas conversaciones no son fáciles, pero ellos manifestaron que su interés no es la huelga, sino que sus derechos queden plasmados en el proyecto de reforma», afirmó Fernández.

La reforma del transporte apunta a mejorar la calidad del servicio, transparentar subsidios y generar condiciones laborales más estables en un sector históricamente marcado por tensiones entre empresarios, trabajadores y usuarios.