Las siglas IA (inteligencia artificial) van ganando cada día más espacio en noticias, análisis y publicaciones en medios de comunicación. Se trata de una combinación de algoritmos planteados con el propósito de crear máquinas que presentan las mismas capacidades que el ser humano, capacidades parecidas pero no iguales a nuestra capacidad. Es una herramienta hecha para acelerar o mejorar nuestro trabajo. Hablamos de máquinas que nos pueden organizar nuestra agenda diaria de acuerdo a referencias pasadas o saber a quién contactar en algún momento en particular para la solución de un problema específico.
Más no todo queda allí ahora en y desde la medicina ya se existe una IA que corrige problemas en la mente que produce IR (inteligencia real); “Ya se ha creado
Una nueva herramienta de inteligencia artificial puede ayudar a tratar los tumores cerebrales de manera más rápida y precisa”. Un tumor cerebral es un crecimiento de células anormales en el tejido cerebral. Pueden ser benignos (no cancerosos) o malignos (con células cancerígenas que crecen muy rápido).
Me es difícil avanzar a desarrollar temas cómo estos por carecer de conocimientos y experiencia médica, más lo abordo por la curiosidad que me despiertan las siglas IA, su nacimiento y desarrollo en distintos campos reemplazando al ser humano que ya va quedando sin empleo por el uso de algoritmos y dispositivos que copiando nuestras habilidades logrando responder mejor y más rápido que nosotros lo que necesite una empresa para encontrar la mano de obra ineficaz.
Cada vez menos humanos
Nos reemplaza por algoritmos que pueden emular mucho mejor nuestro trabajo sin quejas ni protestas cómo es habitual ver o escuchar desde los sindicatos de trabajadores creados desde su principio para defender los derechos del trabajador que ahora añade una nueva tarea a su empleo o vida que es el aprender o conocer más y mejor nuevas tareas para lograr hacer frente al competidor virtual que aunque se llame así su impacto no es tan virtual sino real por el número de desempleados que ya se van acumulando.
Durante décadas, los investigadores de neurociencia se han esforzado por comprender los gliomas, un término genérico para el tumor cerebral más común en pacientes con cáncer. Un tipo de glioma particularmente agresivo es responsable de la muerte de Beau Biden y del senador de Arizona John McCain.
El glioma es una multiplicación de células que comienza en el cerebro o la médula espinal y puede servir para entender qué problema existe y cuál sería el mejor procedimiento para hacer frente al tumor.
Aportes médicos
Para extirpar un glioma de manera segura sin dañar el tejido cerebral circundante, los neurocirujanos necesitan una gran cantidad de información que a menudo no se puede obtener hasta que el paciente está en la mesa de operaciones.
Los gliomas son conocidos como tumores cerebrales intra-axiales debido a que crecen dentro de la sustancia blanca del cerebro ya menudo se entrelazan con los tejidos cerebrales sanos.
“Al operar a pacientes con cáncer cerebral, los médicos envían una muestra al laboratorio de patología para obtener retroalimentación inmediata en tiempo real”, dijo Yu. “Un patólogo puede ayudar a decirles si están cortando el tejido correcto o qué tipo de cáncer específico tiene el paciente”. Con lo disponible ahora en IA los médicos podrán ser más eficaces en su tarea y ganarán los pacientes y la medicina en general. Por lo menos en este campo la IA dará una gran mano.
