(Bloomberg) – Singapur informó más infecciones por Covid-19 entre viajeros del extranjero que casos locales por primera vez en casi medio año, lo que puso a prueba la determinación del país de mantener sus fronteras abiertas en medio de la propagación mundial de la variante omicron.
Se informaron 260 casos importados hasta el mediodía del 1 de enero, en comparación con 187 infecciones comunitarias, según datos publicados por el Ministerio de Salud. La última vez que los casos de Covid-19 entre los viajeros superaron las infecciones locales fue el 12 de julio.
Si bien Singapur ha optado por congelar la venta de boletos a través de sus rutas de viaje vacunados hasta fines de enero, la decisión del centro comercial de mantener los viajes sin cuarentena para las personas vacunadas de varios países, incluidos los hotspots de omicron como el Reino Unido y los EE. UU., Se está probando cada vez más. Otras naciones, incluida Tailandia detuvieron la entrada libre de cuarentena para evitar la propagación de la nueva variante.
Hasta ahora, los funcionarios de la ciudad-estado también han optado por endurecer los requisitos de prueba para los visitantes y aplazar otras iniciativas de viaje, mientras mantienen en vigor estrictas medidas de virus nacionales, a medida que surgen grupos locales de la variante omicron.
Singapur también depende de vacunar aún más a la que ya es una de las poblaciones más vacunadas del mundo para defenderse de una posible nueva ola. Unos 20.000 niños han recibido su primera vacuna desde que comenzó la campaña de vacunación para ellos el 27 de diciembre, dijo el domingo el ministro de Educación, Chan Chun Sing, en una publicación de Facebook.
