La primera ciudad más poblada del Paraguay es Buenos Aires. Estos más los que viven en EEUU, España y otras naciones llegaron a enviar más de 800 millones de dólares al año.Ahora la situación con la pandemia las cosas se han complicado.
Hoy las familias que en el país reman cómo pueden en la crisis económica y con remesas ausentes de sus parientes. Por ejemplo, se sabe que entre enero y febrero las remesas se mantuvieron por los US $5,4 millones mensuales, en marzo la cifra ascendió a US $6,9 millones y para abril se superó la barrera de US $7 millones. Los niveles son muy bajos comparados con años pre pandémicos. No es solo de los Estados Unidos el origen de las remesas al país, se encuentran también en la lista; España, Brasil y Argentina dónde debido al repunte de las economías de estos países se ven volúmenes de divisas de compatriotas radicados en el exterior subiendo pero llevando implícita una crítica hacia la calidad de los gobernantes para generar oportunidades locales.
Oxígeno y critica
Las remesas son un oxígeno pero también una crítica a la calidad de nuestra democracia.
La lenta inmunización no es todavía auspiciosa aquí ni en Argentina y solo será efectiva si al vacunarse uno continúa con los mismos cuidados que tienen las personas que envían las remesas, que hacen que la gente sin trabajo o ingresos puedan por lo menos comer.
Las remesas siguen mostrando la profundidad de la crisis actual y la urgente necesidad de cambiar el paradigma que fuerza a más de mil millones de seres humanos a vivir fuera de sus países de orígenes. Los paraguayos sabemos muy bien su impacto económico, social y político.