El día de hoy se debate en audiencia pública el proyecto de ley para regular el uso y autocultivo de hasta 6 plantas en floración de cannabis, portación de 50 gramos de flores secas y 300 ml de aceites. Además de establecer impuestos y la creación del Instituto de Cannabis.
La producción de cannabis en el país representa cerca de USD 189.000.000 de forma anual, teniendo en cuenta que se venden en la plantación a USD 6 por kilo y se producen en el país aproximadamente 7000 hectáreas en 3 cosechas anuales generando 1500 kilos por hectárea en cada cosecha.
Esta situación convierte al país en el mayor productor de marihuana de América del Sur, abasteciendo principalmente a Brasil y Argentina, pero el verdadero negocio lo obtienen los narcos pagando a USD 6 el kilo a los productores en Paraguay y luego vendiendo en Brasil a casi USD 2.000 por kilos.
Estos datos a nivel macro sirven para observar cómo la lucha represiva del Estado contra la marihuana ha fracasado y contrariamente ha generado más violencia en las fronteras, beneficiando principalmente a los narcos brasileños que se volvieron multimillonarios.
Igualmente, la lucha represiva del Estado contra el consumo del cannabis en el país ha sido un rotundo fracaso, que sólo se encargó de criminalizar y llenar las cárceles de consumidores, desaprovechando así a luz de la ciencia los beneficios medicinales, recreativos y económicos del cannabis.
Actualmente, países como Colombia, Perú, Ecuador, Argentina ya regularon el cannabis para uso medicinal, mientras en Uruguay existe una regulación integral para diferentes usos, además en países europeos, Canadá y varios Estados de los EE.UU ya regularon para uso personal y medicinal. En estos países se demostró que la regulación del cannabis trae beneficios en salud, empleo y recaudación fiscal. En EE.UU, solo en el 2020 generó como negocio USD 17.900.000.000, creó 340.000 puestos de trabajo y se estima una recaudación fiscal para el 2025 de USD 100.000 millones.
La Ley 6007/17 aprobada y que regula el uso medicinal, terapéutico y paliativo del cannabis derivó a la entrega de 12 licencias a laboratorios privados para su implementación, pero es insuficiente y siguen las necesidades para los pacientes que requieren del Cannabis medicinal.
El proyecto de ley que regular y declara de intereses nacional el autocultivo, la producción, industrialización, comercialización, uso e investigación de la planta del cannabis y sus derivados busca ser una propuesta innovadora y de vanguardia planteando los siguientes puntos:
- Descriminalizar la planta de cannabis y sus de derivados, usos y usuarios, bajo un enfoque de derechos humanos y salud pública garantizados en la Constitución Nacional, fijando sanciones administrativas excepto en los casos de delitos conexos.
2. Establecer pautas de prevención de uso en menores de edad, así como restricciones expresas de producción, publicidad y consumo en espacios públicos, entre otras.
3. Autorizar el autocultivo en el domicilio privado y la conformación de asociaciones de cultivo sin fines de lucro, destinado al uso adulto y medicinal de la planta de cannabis y sus derivados, así como la portación limitada de los mismos.
4. Desarrollar un enfoque de regulación y no de represión como establecen actualmente las leyes del país. Ahora se busca que el Estado efectivamente regule el mercado, desplazando el mercado ilegal y permita el acceso a todos los necesitan.
5. Permitir a las personas mayores de 18 años poseer su autocultivo dentro la vivienda y sin necesidad de licencia o autorización alguna tener hasta 6 plantas de cannabis en estado de floración, para uso personal, y siempre que no persiga fines de comercialización o de lucro.
6. Permitir a las personas mayores de 18 años la portación de un máximo de 50 gramos de flores secas y/o hasta un máximo de 300 ml de aceites de extracciones, sin incurrir en ningún tipo de contravención de orden público.
7. Propiciar la creación del Instituto Nacional de Cannabis (INCANNA) como órgano estatal de carácter público con participación de la sociedad civil, con amplías atribuciones para el cumplimiento de los objetivos de la ley.
8. Independientemente a los mecanismos de autoabastecimiento, a través del INCANNA se autoriza expresamente la producción, industrialización y distribución de cannabis con fines comerciales, para lo que se habilitarán dispensarios para garantizar el acceso.
9. El proyecto de ley también establece gravar la comercialización del cannabis y sus derivados como Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) donde se estable una tasa mínima de 1% y máxima de 15%, diferenciando si se trata de organizaciones cultivadoras solidarias de uso medicinal.
10. Además, el proyecto de ley busca declarar al rubro de interés nacional, enfocado en la salud de nuestros enfermos, los derechos económicos de la agricultura familiar campesina y el potencial industrial y tributario que podría representar para nuestro país.
Paraguay siendo el mayor productor de cannabis no puede seguir desaprovechando el potencial económico, fiscal y medicinal que tiene esta planta. Además, si el Estado regular el mercado, puede terminar desplazando al mercado ilegal que tanto beneficia y enriquece a los narcos brasileños.
La audiencia pública sobre el proyecto de Ley “Por la cual se declara de interés nacional la planta de cannabis y sus derivados” se realizará esta mañana desde las 08:30 horas en el Congreso Nacional.
Para leer el proyecto de ley completo puede acceder desde el siguiente link: http://silpy.congreso.gov.py/expediente/127089