El senador Patrick Kemper, titular de la Comisión de Industria, manifestó que el estudio del Presupuesto de Gastos de la Nación (PGN) para el 2023 que presentará el Ministerio de Hacienda al Congreso el próximo 1 de setiembre, debe ser un presupuesto muy cauteloso porque se tratará de un año electoral.
Su criterio es no aumentar impuestos para salir de la crisis económica y poner atención al control de los gastos rígidos. Adelantó que se encargará de escudriñar los detalles del PGN para, entre otras cosas, detectar si en los gastos rígidos de los presupuestos de las instituciones se encuentran la creación de cargos para operadores políticos disfrazados de sueldos a funcionarios.
“El Estado tiene un déficit bastante elevado y no podemos dejar que siga aumentando el próximo año, sobre todo con gastos superfluos y gastos rígidos para pagar operadores políticos en pleno año electoral. Debemos ser cautelosos y vamos a controlar esa parte”, sostuvo.
Agregó que todo todo gasto superfluo debe ser eliminado, ya sea seguro VIP, cupos de combustibles, servicios de catering, compra de papeles, etc., además dijo que el PGN 2023 debe estar acorde a nuestra realidad y situación económica después de la pandemia.
“Necesitamos un presupuesto austero, realista, prudente, que tenga como meta levantarnos de esta crisis, que no aumenten los impuestos para los que generan empleos, que establezca incentivos, que aumente el control contra la evasión impositiva, y en definitiva que mejore la calidad del gasto, enfocado principalmente en las inversiones, en la mejora de los procesos con la tecnología, la eliminación los gastos superfluos y los gastos rígidos que será uno de los temas que estaremos controlando porque estamos en año electoral”, finalizó.