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Noche y depresión

La depresión es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por sentimientos de tristeza, pérdida de interés y dificultad para afrontar la vida cotidiana. Hay muchas razones por las que tu estado de ánimo pueda decaer por la noche. No es raro que nuestra mente desate un torrente de sentimientos difíciles al amparo de la oscuridad: la tristeza y los pensamientos negativos pueden aflorar por la noche, lo que dificulta conciliar el sueño. un ejercicio importante para quien desee rendir bien en su jornada, por cómo influye el descanso en nuestra mente y cuerpo.

El cuerpo no solo debe estar bien alimentado, cuidado de accidentes o acontecimientos desagradables para nuestra salud y vida sino deben tener actividades sanas cómo la lectura, una caminata o diálogo con otra persona a quien podamos confiar lo que afecta a nuestro humor o espíritu y así comunicando nuestras complicaciones, nos escuchamos y a su vez oímos la evaluación que hagan de nosotros, ofreciéndonos consejos y recomendaciones de otras experiencias, que aunque no sean similar a lo que hayamos vivido pueden servir para solucionar lo que exista en nuestra mente.

Ella  no solo necesita alimentarse de buenos alimentos, tener a su vez  actividades sanas y sobre todo reposar en tiempos oportunos que tengamos en nuestras jornadas, que están divididas en cuando nos despertamos, desayunamos, vamos a estudiar, trabajar o hacer lo que tengamos en nuestras agendas.

Entre algunos síntomas que existen para identificar la depresión en cualquiera, destacamos:

  • Sentimientos de tristeza, ganas de llorar, vacío o desesperanza
  • Arrebatos de enojo, irritabilidad o frustración, incluso por asuntos de poca importancia
  • Pérdida de interés o placer por la mayoría de las actividades habituales o todas, como las relaciones sexuales, los pasatiempos o los deportes
  • Alteraciones del sueño, como insomnio o dormir demasiado
  • Cansancio y falta de energía, por lo que incluso las tareas pequeñas requieren un esfuerzo mayor
  • Falta de apetito y adelgazamiento, o más antojos de comida y aumento de peso
  • Ansiedad, agitación o inquietud
  • Lentitud para razonar, hablar y hacer movimientos corporales
  • Sentimientos de inutilidad o culpa, fijación en fracasos del pasado o autorreproches
  • Dificultad para pensar, concentrarse, tomar decisiones y recordar cosas
  • Pensamientos frecuentes o recurrentes sobre la muerte, pensamientos suicidas, intentos suicidas o suicidio
  • Problemas físicos inexplicables, como dolor de espalda o de cabeza

Prever consecuencias

Síntomas que durante las noches pueden agudizarse, cuando naturalmente debemos estar descansando para poder enfrentar bien los desafíos que ya tengamos agendados y el hacerlo estando deprimidos no ayuda porque no estamos encendidos con ganas y alegría por contar con las herramientas necesarias para trabajar bien y sin problemas cómo lo que significa trabajar en o con algo que no nos guste.

Aunque la ansiedad también puede aumentar por la noche y tiende a hacer que las personas se sientan agitadas, tensas e inquietas, la depresión nocturna se caracteriza mejor como un decaimiento del estado de ánimo.

Quizá sea por la oscuridad, mucho silencio o momento en el que nos vamos apagando automáticamente porque nos encontramos cansados por el esfuerzo mental o físico que hayamos invertido en alguna tarea específica. 

“La depresión nocturna también puede resultar incómoda, “no solo en la mente, sino también en el cuerpo”, dijo Miskimen Rivera, profesora clínica de Psiquiatría en la Universidad de Rutgers y presidenta electa de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la depresión es un problema de salud pública importante, y que más del 4% de la población mundial la padece. Los grupos de población más propensos a padecerla son las mujeres, los jóvenes y los ancianos. 

Los horarios importan

La depresión nocturna también puede resultar incómoda, “no solo en la mente, sino también en el cuerpo”, añadió Miskimen Rivera, sobre todo si estos sentimientos interfieren con la conciliación del sueño y no logren hacer que podamos dormir en paz en el tiempo que tenemos para reconectar nuestras neuronas,  consolidar la memoria y a mantener los recuerdos en la línea temporal correcta, eliminar las toxinas que se almacenan en el cerebro al estar despiertos. 

La noche es un tiempo creado para reposar, no solo nosotros, sino el barrio y la comunidad que integremos y debemos respetar para que todos podamos descansar y recuperar las energías adecuadamente para que a su vez rindamos cómo debe ser en nuestras jornadas que deben tenernos con alegría y enfocados en la tareas que nos encomienden hacer.

Y para asegurar un éxito en esas encomiendas debemos;

  •  Dormir bien
  • Comer saludable
  • Hacer ejercicio
  • Controlar el estrés
  • Practicar técnicas de relajación
  • Mejorar las relaciones interpersonales
  • Identificar los  pensamientos negativos 
  • Practicar la positividad

Recomendaciones validas para tenerlas en cuenta y evitar sus consecuencias.

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