Luego de la crisis ecuatoriana, casi que inmediatamente después se produjo la crisis en Chile, la peor en 3 décadas. La cual tuvo su detonante en el aumento del pasaje del Metro 30 Pesos (0,4 $/US), a partir de allí una manifestación violenta, salvaje y delictiva cuyo saldo fue de 10 occisos, poco menos de 200 efectivos policiales lesionados, 300 civiles heridos y más de 1.500 detenidos. Si bien es cierto, no lograron sitiar al gobierno de Sebastián Piñera como ocurrió con Moreno en Ecuador, si lo obligaron a retroceder el ajuste. Ahora bien, algunos podrán sostener que soy un brujo o que pude leer el futuro con algún instrumento pagano, nada más lejos de la realidad.
Simplemente resulta previsible que la Cuba Comunista con el fin de la Guerra Fría mutó un Narco-Estado Forajido que conquistó la Venezuela petrolera de Chávez, con lo cual expande no sólo su proyecto neo-comunista, sino lo más importante, el tamaño y las ganancias de su mercado protegido para las operaciones del crimen organizado trasnacional. La evidencia la encontramos en las recientes declaraciones de autócrata de Caracas, Maduro quien dijo: “le puedo decir desde Venezuela, estamos cumpliendo el plan Foro de Sao Paulo. El plan va como lo hicimos, va perfecto el plan, ustedes me entienden. Foro de Sao Paulo, el plan va en pleno desarrollo, victorioso”.
Concluyendo, la democracia representativa está amenazada de muerte. La agenda cubano-venezolana más temprano que pronto atacará Brasil, Colombia, Perú y Paraguay. Lo cual exige de las autoridades que activen sus Agencias de Inteligencia, desplieguen un operativo para evitar que la destrucción y el caos llegue al Paraguay. Pero también exige del gobierno un serio compromiso para mejorar y ampliar el sistema de salud, promover empleos, que los profesionales estén bien pagados y se expanda el bienestar