La palabra educación etimológicamente viene del latín educere que significa conducir, guiar, orientar. Nada nuevo para los que educan y hemos sido educados para y por algo en un país donde no se toman medidas efectivas para mejorar el nivel y proyectar a la sociedad hacia un camino o destino apropiado que sólo puede conducir una buena educación.
Hoy en el habitual tres por tres de Benjamín Fernández Bogado en este diario veo que uno de ellos se refiere al punto que emula al título de mi escrito.
El mismo lleva el título de Aprendiendo en medio de la nada. Allí el autor describe cómo es la experiencia de la Universidad Estatal de New México dónde varios paraguayos estudiaron ciencias agrarias. La misma está en pleno desierto de Chihuahua en la ciudad de Las Cruces de 100 mil habitantes.
La agricultura tiene demasiadas cosas que pueden servir para muchos en medio de la nada y de todo. Es una realidad que Asunción del Paraguay no está en medio de esa nada y a su vez que sus estudiantes tampoco. Por eso existen muchas facilidades para materializar ideas para el país desde la orientación que pueda dar la agricultura aumentando la capacidad productiva orientada hacia lo orgánico. Paraguay puede dar de comer a 60 millones de seres humanos pero no puede hacerlo todos los días con 2 millones de compatriotas que van cada noche a la cama si probar un bocado.
La agricultura forma parte de las elecciones de becarios paraguayos que fueron a las universidades de New México para poder utilizar lo aprendido a favor de la agricultura paraguaya y lo que esta puede dar al mundo.
Además de programas y proyectos claros bien diseñados y ejecutados en la educación para la niñez y juventud del país se debe adherir también el interés y voluntad del educando para el éxito de lo que se hace arma y fomenta desde cualquier organismo que trabaje para la conducción del estudiantado hacia el mundo fuera de las aulas.
Aprender para hacer
Ideas y trabajos que en este tiempo han sido el hábito de escuelas, universidades y oficinas para poder o intentar acercarse a la formación que se hacían entre las 4 paredes de un aula. Una virtualidad que para muchos no ha sido la mejor solución para lograr enseñar bien con la inmensa cantidad de distracciones que significa el estar frente a un monitor conectado a la Red internacional.
La nada es clara entender. Una palabra que indica el vacío de gente, ideas, infraestructuras y todo lo que exista para que ese algo o alguien sirvan para satisfacer las necesidades del todo.
Un todo que solo puede sobrevivir y dar sentido a su existencia al tener un algo o sueño que desee alcanzar con el uso de lo aprendido en alguna ciencia. Que sea útil para el entorno y que genere satisfacción a la persona que la use para la creación del algo trascendente para todos. Podemos y debemos hacerlo
