Comentario 3×3
Por Benjamín Fernández Bogado
Las medidas económicas anunciadas por el Gobierno solo han traído mayor confusión e incertidumbre, además de la angustia de tener que saber que se van a contraer nuevos créditos, con lo cual se van a sobrepasar los números establecidos en términos de lo que significa el buen manejo de la administración pública de un país.
Superar el 30% del producto interno bruto en términos de endeudamiento es una cuestión grave y el Paraguay ha ingresado en ese factor desestabilizador que casi siempre nos trae a la memoria lo que les pasó a nuestros vecinos los argentinos.
El Paraguay podría entrar en una fase de argentinización en muy corto tiempo si es que no logramos hacer la tarea que debieran nuestros administradores. Cortarse la carne es la expresión que se dice cuando se afectan cuestiones que tienen que ver profundamente con la administración pública y del Partido político al frente.
Hay que reducir notablemente la cantidad de empleados públicos, hay que recortar sus salarios, hay que acabar por completo con todos los privilegios de este sector que nos cuestan miles de millones de dólares.
El segundo paso, también trascendente como el primero, es evitar la corrupción en la compra de bienes y servicios, ese es otro factor que se lleva fácilmente la mitad de lo que está destinado para dicho rubro.
Si lográramos hacer las dos cosas al mismo tiempo, ese sería el gran anuncio económico que evitaría que nos fuéramos al abismo, a una pobreza todavía mayor, o a una posible argentinización de la economía paraguaya.
