Los EE.UU ya tiene un nuevo presidente, administrador, ejecutivo o primer mandatario hasta el 2029, año en el que Trump dará espacio a quien lo reemplace en la compleja tarea de gerenciar un país.
Trump cómo presidente, Vance cómo vicepresidente y su gabinete desde la oficina oval de la Casa Blanca tendrán mucho trabajo para volver hacer grande a los EE.UU. Un país de 9.834 millones de km². Geográficamente de dimensiones bastante grandes, más no es a lo que apunta agrandar el nuevo equipo que presidirá este nuevo periodo presidencial en el “hogar de los orgullosos y valientes”.
Lo que tienen en mente es ampliar y mejorar la calidad de vida de su población, que ha elegido a un republicano y que ya conoce por su última gestión en este país. Del que habitualmente tenemos mucha información desde el ámbito artístico, deportivo o alguna novedad científica o de iniciativa social.
Ahi donde se implica que el mismo ciudadano sea el personaje destacado por haber hecho algo que no solo se destaque en su país o continente sino hoy día gracias a que casi todos podemos tener acceso a la red internacional, cualquiera en cualquier lugar y momento se hace famoso por hacer público lo primero que se le cruce por su cabeza o por haber participado en alguna serie de televisión cómo fue el caso del actual pdte Trump. El mismo que dirigió “el aprendiz”(2004-2017), en la que la gente lo recuerda cuando protagonizando al jefe o the boss gritaba a su empleado; “you’re fired”, “estás despedido”, algo que nadie querrá escuchar donde y cuando sea en su vida por el valor que tiene para todo estar ocupados con algo y tener la seguridad y oportunidad de ser reconocidos por el trabajo físico o mental entregado a un empleo.
El reality de la política
En ocasiones creemos que el trabajo no es un dilema que puedan presentar países cómo los EE.UU, más es un problema que también existe en este país que reúne complicaciones, por ese también tiene preocupaciones acerca de varios aspectos que siguen generando desasosiego entre los nativos estadounidenses y extranjeros que viven en el país. Ahi donde se destaca por ser un crisol de culturas, personas, ideas y una variedad de aspectos que los diferencie el uno del otro, no solo ahora sino desde siempre.
Este país norteamericano no fue noticia solo por haber sufrido la visita de accidentes naturales muy grandes sino por haber tenido cómo figuras a extranjeros que gracias a su dedicación y trabajo particular han logrado tener reconocimiento político, artístico, académico, deportivo o empresarial.
Valoración que implica tener en cuenta lo que haya hecho o cómo se haya preparado la persona reconocida, no todo en la vida es por el azar, la fortuna o casualidad para ser premiado auténticamente o lograr llegar a niveles importantes en cualquier esfera. Es importante tener siempre no solo el aval del elector, jurado o personas que puntuen el rendimiento de la persona que compita para algo sino sobre todo el pasado del reconocido, que depende mucho de cómo actúe y lo que haga en su presente para asegurar su futuro que le toque vivir.
En el caso del nuevo presidente estadounidense, no se trata solo de su vida sino de la de 334,9 millones de estadounidenses, que dependen de cómo haya descansado, comido o hecho el presidente número 47 de este país. Que estará bajo la lupa no solo de la prensa sino de un importante número de esa población y del mismo mundo también, ahora que el acceso a información y conocimiento se hizo más rápido y fácil para cualquiera, podemos saber lo que pasa en nuestra casa o en las antípodas de nuestro país inmediatamente.
Problemas transfronterizos
No es lo único que preocupa a este nuevo gobierno de los EE.UU sino otros aspectos cómo lo qué estará en juego para México ahora que Trump vuelve a la presidencia.
Ya sabemos que Donald Trump prometió en campaña aranceles, acuerdos comerciales negociados e incluso una intervención militar contra los cárteles mexicanos que tienen en su vecino del norte un importante mercado de consumidores de estupefacientes, que al continuar el ingreso, distribución y consumo de la droga en este país se corre el riesgo del aumento de la inseguridad y personas que corran el riesgo de padecer problemas de salud.
Por otro lado, lo que preocupa más que nada al extranjero es si Trump impedirá que los extranjeros sigamos viajando hacia EE. UU. lugar en el que viven parientes, amigos, conocidos y que se beneficia del trabajo hecho para ellos. Ahora los migrantes están sopesando un nuevo gobierno de Trump a la hora de decidir si viajan o no a los Estados Unidos que con el tiempo y poca atención a su aspecto y forma de ser con el extranjero y ellos mismos ha perdido el encanto de lo que era aquel “sueño americano” que hizo migrar a muchas personas desde Europa, Sudamérica y varios rincones del planeta para hacerse de un techo, empleo y comodidades básicas que no existían en sus países. Y es una de las razones por las que sigue en vida el ejercicio del migrar a otras latitudes y que Trump hará politica de gobierno para combatir a los ilegales.