El Gobierno avanza con la licitación de proyectos clave en alcantarillado sanitario, tratamiento de aguas residuales y mejoras en el servicio de agua potable en diversas ciudades del país. Estas iniciativas representan una inversión superior a los 300 millones de dólares, marcando un hito en infraestructura sanitaria.
Actualmente, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), a través de su Dirección de Agua Potable y Saneamiento (Dapsan), tiene en marcha varios llamados a licitación con fechas de presentación de ofertas ya establecidas.
Entre las principales obras en proceso de adjudicación se encuentran el diseño y construcción de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) y el emisario subfluvial de la Cuenca Lambaré, con un presupuesto estimado en 236.575 millones de guaraníes. Además, se prevé la ejecución de sistemas de captación, tratamiento y almacenamiento de agua potable en Ciudad del Este, cuya primera fase demandará aproximadamente 289.649 millones de guaraníes.
Otro de los proyectos destacados es la construcción de sistemas de alcantarillado y agua potable en la Cuenca de Mariano Roque Alonso, con una inversión superior al billón de guaraníes.
Obras ya en marcha y expansión futura
A estos llamados en curso se suma la ejecución de sistemas de alcantarillado sanitario, plantas de tratamiento de aguas residuales y mejoras en el suministro de agua potable en Santa Rita, San Ignacio Guazú, Carapeguá y Santa Rosa del Aguaray. Estos trabajos, adjudicados en noviembre pasado, representan una inversión de 358.937 millones de guaraníes.
Además del financiamiento destinado al diseño y construcción de estas infraestructuras, se están licitando servicios complementarios como fiscalización y gerenciamiento de obras.
El MOPC también proyecta ampliar significativamente la inversión en este sector en los próximos años, con el respaldo de organismos internacionales, alcanzando un estimado de 600 millones de dólares.
Impacto en la calidad de vida y generación de empleo
Las obras de saneamiento y agua potable beneficiarán a más de un millón de paraguayos, reduciendo la exposición a aguas residuales y minimizando riesgos sanitarios asociados a enfermedades de origen hídrico.
Asimismo, el tratamiento adecuado del agua garantizará su calidad, promoviendo un entorno más saludable para la población. Paralelamente, estos proyectos impulsarán la generación de empleo en las zonas de influencia, ofreciendo oportunidades laborales a miles de personas.
