El día 22 de febrero del 2023 la gloriosa Fuerza Aérea Paraguaya completó un siglo de existencia. En este espacio, vamos a hablar un poco de su pasado glorioso, de su presente y de los desafíos.
El historiador Antonio Luis Sapienza Fracchia cuenta que tiene sus orígenes en la Escuela de Aviación Militar, institución que fue fundada en 1923. No podemos dejar de presumir su inicio muy humilde, recién en 1926, con la llegada de la Misión Militar Francesa, alcanzó una organización optimizada. Con ello, también se pudo realizar una preparación adecuada para el conflicto que ya se empezaba a delinear, la Guerra del Chaco (1932-1935)
En ese año, prosigue el historiador, surge la gloriosa Aviación de Campaña que tuvo una brillante actuación, aun ante la gran superioridad del enemigo, que contaba con más de 100 aviones de combate modernos para la época. Todas las misiones de la Aviación Paraguaya fueron realizadas con éxito: reconocimiento, bombardeo, caza, transporte, evacuación Aeromédica, enlace y paralelo a eso se seguía formando pilotos y mecánicos para las máquinas aéreas.
La Aviación de Campaña derribó innúmeros aviones enemigos y en tierra destruyeron otros tantos. Además, fueron inutilizados numerosos otros puestos estratégicos del enemigo, así como aviones abatidos por una artillería antiaérea que al principio no estaban muy adecuadas para la misión. Más tarde, fueron capturados del contendiente unos antiaéreos Semag-Becker que ayudaron mucho más para la victoria final.
Ya en la posguerra, la insipiente Aviación Militar fue conocida como Arma Aérea cuando recibió una veintena de nuevas aeronaves italianas y otras tantas americanas por un programa de préstamos y arriendos. Durante la Segunda Guerra Mundial, pilotos paraguayos becados en Brasil participaron activamente en misiones de patrulla en el Atlántico Sur, añade la historia contada de Antonio Fracchia.
En su seno también tuvo origen las líneas Aéreas de Transporte Nacional (LATN). En los años 50, nace el Transporte Aéreo Militar (TAM) que durante casi medio siglo unió diversas regiones lejanas a bordo de los DC3/C-47 primero y después siguen haciéndolo en las aeronaves CASA C-212 –AVIOCAR. Ya en los años 60, se funda dentro del Comando de la Aeronáutica, la empresa Líneas Aéreas Paraguayas (LAP), que conectó al país con las principales ciudades del mundo durante más de 30 años. Luego fue privatizada y en realidad está empresa aérea existe hasta hoy en día, operado por la LATAM, una fusión entre la TAM brasileña, dueña de la TAM paraguaya con la chilena (LAN). Recuerdo hasta hoy la tripulación comandada por el General Calvet, era una tropa de élite.
Los 70 primeros años del Comando de la Aeronáutica fueron de grandes avances con muchas aeronaves recibidas de diversas naciones amigas. Se funda también en ese periodo la Primera Escuadrilla de Demostración Aérea “Ara sunú”. Ya en la era de los Jet, el Comando se transforma en Fuerza Aérea Paraguaya (FAP). Y, en ese momento, llegó a su pico más alto de operacionabilidad y desarrollo, así como también comienza su decadencia en consecuencia de la crisis económica vivida en los 90 que afectó a todos. (Antonio Fracchia)
EN LA ACTUALIDAD
Según el General de Brigada Aeronáutica Edwin Martínez, Comandante de la Brigada Logística: “La FAP en la actualidad cumple básicamente funciones administrativas y de apoyo a las instituciones del Estado y autoridades nacionales, pero no así su función constitucional que es la custodia del Espacio Aéreo Nacional y la soberanía territorial de los cielos del país.” – no tiene condiciones de controlar el espacio aéreo (defensa nacional) por algunos motivos ampliamente conocidos por todos: adquisición de los radares, así como las aeronaves (en cantidad y calidad) necesarias para poder medir fuerzas con los que vuelan sin las autorizaciones debidas.
“La capacitación permanente y las doctrinas militares requeridas están en día, pero sin el ojo que pueda visualizar en tiempo oportuno y sin las aeronaves que puedan interceptar, identificar y obligarlos a aterrizar, no hay como mantener la soberanía del espacio aéreo paraguayo. Los últimos Xavantes que tenían la FAP ya fueron jubilados, las doctrinas se siguen manteniendo en el AT27 Tucano, en la actualidad Brasil lo hace en los AT29 Supertucanos” añade el comandante de la Brigada Logística.
En la actualidad está promulgada la Ley DE VIGILANCIA Y PROTECCIÓN DEL ESPACIO AÉREO PARAGUAYO o “Ley de Radarización del territorio nacional”. El Paraguay necesita mínimamente nueve radares para cubrir todo el territorio nacional. La FAP en la actualidad vienen realizando como siempre el transporte de autoridades y evacuaciones diversas (de manera frecuente) desde traslados de urgencia y emergencia médica para la población en general, así como el trabajo con otras instituciones como la SENAD, las binacionales y otras secretarias, que son misiones muy importantes, sin embargo no cuenta las herramientas necesarias para el cumplimiento de su misión constitucional.
Existe un banco de proyectos aprobados y urgentes en la Secretaria Técnica de Planificación, totalmente analizados por la (DGIP) y con código (SNIP), así como en otras instituciones que apoyan a la FAP, entre ellos la adquisición de aeronaves para entrenamiento y combate, helicópteros, aeronaves de transporte, creación de una Escuela de Suboficiales e institutos de idiomas. Entre otras cosas podríamos mencionar que en el Comando de Institutos de Enseñanza – CIAERE, se cuenta con tres programas de maestría (funcionando activamente) que tienen acreditaciones importantes a nivel nacional, o sea, en la formación del factor humano, que viene a ser lo más difícil estamos al día, pero faltan materiales como los radares y aeronaves de interceptación para cumplir lo que nos encomendaron en la CN.” (Edwin Martínez).
EL FUTURO DE LA FAP
Según su actual comandante, el General del Aire Arturo González, “el gran desafío, sin dudas es el control del espacio aéreo paraguayo”, -no es por algún motivo hostil de naciones limítrofes, sino por el gran desafío que es mantener el control por el tema de los crímenes nacionales y transnacionales. Un conflicto de carácter internacional (entre naciones vecinas) es poco probable, pero no imposible y eso hace que el país deba hacer centinelas de sus intereses vitales, aquellos intereses que una vez atacadas, cualquier país entraría en guerra, pues saldría más costoso no hacerlo.
Sin embargo, el crimen transnacional es diario y constante. Esa lucha soberana estamos perdiendo por algunos motivos obvios: el estado paraguayo (como cualquier otro) actualmente tiene una infinidad de prioridades y lo recaudado no da abasto para cubrir todas las necesidades. La seguridad nacional es una decisión que pasa por la política y no por las Fuerzas Armadas, que no teniendo los recursos necesarios no puede completar su misión constitucional.
El comandante de la Fuerza Aérea Paraguaya – FAP agrega “para que la misión constitucional sea posible hay que tener medios de detección (radar) centro de mando y control, medios de interceptación, medios de comunicación y las leyes apropiadas para los efectos de ataque y persuasión”.
González añade, que la adquisición de los radares primarios ya tiene media sanción en la Cámara de Senadores y, por supuesto, la compra de medios tácticos (aviones Súper Tucanos) ideales para llevar a cabo la misión, los Cessnas Grand Caravan, ambulancias aéreas, helicópteros nuevos y no depender solo de los donados por Taiwán y otros aviones de carga estratégicos. Él también añade que durante la pandemia algunas misiones básicas fueron difíciles de cumplir por no disponer de aviones de alcance suficiente para el transporte de las vacunas.
Finalmente resalta que hay proyectos aprobados por más de US$ 400 millones que esperan fuentes de financiación y autorización del Ministerio de Hacienda para llevar a cabo la adquisición y construcción de los proyectos como la nueva comandancia, la nueva escuela de suboficiales que es la que en realidad completa un siglo, así como un mirador y cerco perimetral con jardines para que la sociedad pueda aprovechar el espacio y hacer sus caminatas de salud con toda la seguridad posible.
Conclusión: la FAP dispone de recursos humanos preparados a espera de una decisión política que pueda impulsar condiciones y dar herramientas para que puedan tener el control de por lo menos la soberanía interna; defender los intereses vitales y evitar ser ruta y guarida del tráfico internacional de drogas ilícitas, así como de contrabando que tanto perjudica a la producción nacional y los ingresos en la caja fiscal de la aduana y Ministerio de Hacienda.
El Gral. Arturo González también sugiere agregar US$ 10 a cada pasajero que entra por los aeropuertos en la tarifa de vuelo que ya es una de las más baratas del mundo. Yo haría lo mismo con las cargas de importación y exportación de productos (vía área) y eso también serían parte de una solución viable, rápida y práctica para que todos ellos puedan entrar y salir del país con la seguridad que todos esperan encontrar a su llegada y partida. Según el Gral. Brig. Aer. Edwin Martínez, ese modelo funciona muy bien en la Rca. Dominicana, y copiarla sería una solución rápida y barata. Sin radar, no hay seguridad y sin ella, no hay confianza.
Nota: quien escribe y los Generales Edwin Martínez y el actual Comandante de la FAP, el Gral del Aire Arturo Javier González Ocampo compartimos el patio del Liceo Militar “Acosta Ñú”, específicamente en el año 1983. Edwin tenía 12 años y yo, con 17, fui su Encargado de Pelotón. Arturo fue mi camarada de remesa (misma promoción) y egresamos juntos en el año 83. Ellos siguieron la carrera militar y llegaron a lo máximo.
Félix Gerardo Ibarra Prieto* es empresario y profesor universitario en Brasil.
