Recordando que el acto de enviar fotos íntimas a un interés amoroso debe ser una actividad consensuada, en la cual ambas partes deben establecer un principio básico de confidencialidad y no divulgación, el sexting puede considerarse como un impulso para generar más ganas y mantener el interés elevado en la pareja.
Así, en una entrevista para la agencia de comunicación EFE, el doctor José Díaz Morfa, psicólogo y presidente de la Asociación Española de Sexología Clínica (AESC), explicó que cualquier conducta sexual en sí misma no es dañina, si no el uso que se le da. Por ello, no puede verse al sexting como un enemigo, sino como una posibilidad de producir más erotismo en la pareja.
A continuación, te traemos una serie de frases que podés utilizar con tu vínculo socioafectivo y así encender las ganas y la excitación en la pareja.
“¿Te gustaría ver qué traigo puesto?”
Con esa simple pregunta se puede dar inicio a una conversación consecutiva repleta de mucho estímulo. Esto si no sabés muy bien cómo empezar a generar las ganas en tu pareja.
“Cuando te vuelva a ver tengo pensado…”
La frase da pie a introducir cualquier idea que prefieras, desde una posición poco habitual, algún nuevo lugar que te gustaría experimentar, hasta el simple comentario referente a la piel, el cuerpo y lo que te hace sentir el contacto con esa persona.
“Pensando en vos, se me escapó un gemido”
Con esta expresión no solo lograrás descolocar a tu pareja porque no se esperará una insinuación tan elevada de manera repentina, automáticamente el estímulo estará insertado y podrías aprovechar para recrear escenarios sexuales a través de otros mensajes.
¿Dónde me tocarás primero cuando nos veamos?
Con esa incógnita, dejarás que tu interés amoroso tome la decisión del rumbo que tendrá la conversación, aprovechando para jugar un poco con la imaginación que podrían tener acerca de lo que esperan, instalando la excitación como antesala para el próximo encuentro.
¿Recuerdas cuando estuvimos en…?
Al hacerle una pregunta referente a un momento en el cual ambos rebosaron de placer y excitación, le traerá recuerdos a la otra persona y se dará pie a que ambos tengan muchas ganas de repetirlo, lo cual se verá multiplicado si empiezan a describir lo que más les gustó del otro y cómo lo veían.
