Los vestidos blancos son una de las debilidades de la Reina Letizia, según contó Vogue España, su majestad se ha decantado por un diseño más elevado de lo habitual en el que el encaje se ha convertido en el auténtico protagonista de la jornada.
La fecha escogida en cuestión ha sido el acto de entrega de la Bandera Nacional a la Fuerza de Guerra Naval Especial en el muelle Juan Sebastián de Elcano en Cartagena, Murcia, evento para el que Doña Letizia apostó por este diseño de corte trapecio, uno de sus favoritos, escote caja y sin mangas en el que el toque especial lo puso el encaje, que remite a los vestidos de novias.