El psicólogo musical Daniel Müllensiefen de la Universidad de Londres dio a conocer, en su estudio Science Behind the Song, que escuchar música estimula igual o más que el tacto durante el acto sexual.
El estudio fue encargado por Spotify y realizado a 2.000 personas del Reino Unido de entre 18 y 91 años. La banda sonora de la película ochentera Dirty Dancing protagonizada por el actor Patrick Swayze fue la seleccionada como la música más excitante durante las relaciones sexuales.
Por otro lado, la encuesta arrojó datos de las 20 mejores canciones que “excitan” o “animan” para las relaciones sexuales. La canción más votada y que se encuentra como número uno, es “Sexual Healing” de Marvin Gaye. Factores como voz aguda, sonido ronco y rango más dinámico, se destacan como factores importantes en las canciones para el amor.
También cabe destacar Bohemian Rhapsody de Queen, que encabeza la lista de canciones, seguida de Sex on Fire de los Kings of Leon y Angels de Robbie Williams, se pueden considerar como “obras maestras”.
Las canciones que elegimos para el momento amoroso dependen también de la intención que tenemos, nuestra personalidad, nuestros gustos musicales y el contexto en el que estemos.
CÓMO INFLUYE LA MÚSICA EN LA QUÍMICA
La música es pasión y puede llegar a tocar hasta el último nervio en el cuerpo humano. Aprovecharla como herramienta de seducción es una buena recomendación. Los expertos aconsejan dejarse llevar por los sonidos y las caricias, un camino de seducción que pondrá a prueba la imaginación entre ambos.
La psicóloga clínica Olga González confesó que no existe solo un tipo de música que se puede usar en las relaciones sexuales, sino que está en lo que a cada uno le gusta, en hacer una mezcla de ritmos que puedan ser usados en los diferentes momentos del acto sexual, se podría escuchar algo más suave y algo más rápido.
“Todo lo que nos genere placer tiene que ver con una secreción de neurotransmisores responsables del buen humor, desde el momento en que logran conectarse con aquellas actividades que les producen agrado y placer están generando neurotransmisores que favorecen un mejor relacionamiento. Compartir un momento escuchando música es una conducta que favorece la relajación de la pareja”, afirmó la psicóloga.
Un consejo que no puedes olvidar es preguntarle a tu pareja cuál es la música que más le incita, gusta y proporciona bienestar en un encuentro sexual. Pueden planear una relación sexual como ambos quisieran vivirla, tomen el tiempo que sea necesario como si fuera un vino, elijan su ritmo, sus sonidos, su voz y déjense llevar.
“Está comprobado que la música favorece la relajación o la aceleración. El sonido del saxofón o los compases tipo jazz favorecen el erotismo, acompañan la conducta sexual, el cine porno los utiliza. Sin embargo, si tu pareja pone un reguetón en el encuentro sexual y a vos no te gusta ese estilo, pueden emerger sentimientos repulsivos, te preguntas qué significa, qué me estará queriendo decir con esa música y se bloquea el buen encuentro sexual. La comunicación es importante, va a permitir conocer los gustos de la otra persona”, enfatizó la especialista.
Asi también, agregó que hay que ser conscientes que cada uno maneja sus propias preferencias, no hay una sola modalidad, una sola clave para disfrutar de la sexualidad
“La música puede conectarnos a un estado de relax, de disfrute, recuerden que el cerebro tiene una memoria afectiva y una canción nos conecta con alguna emoción, muchas parejas tienen rituales, la canción con la que se conocieron, etc, que les conecta con recuerdos, usen todo eso para el disfrute de ambos. Además, el amor tiene que tener intencionalidad, dejamos mucho a la espontaneidad y es importante una relación donde se potencie el erotismo, con velas, una comida especial y buena música”, concluyó la psicóloga clínica.
