La Cámara de Diputados trató el juicio político de Antonio Fretes, presidente de la Corte Suprema de Justicia en sesión extraordinaria.
La Cámara Baja rechazó el juicio político debido a que no se alcanzaron los votos. Las votaciones terminaron 33 a favor del juicio, 27 rechazos, 21 ausencias y 2 abstenciones. Con esto no se alcanzó la mayoría de dos tercios de los presentes (41 votos). Parte del oficialismo votó a favor de la destitución.
Un total de 15 diputados firmaron el libelo.
Sebastián Villarejo, diputado nacional por Patria Querida (PPQ), expresó que el juicio político es la única herramienta constitucional para poder destituir a Fretes.
“Si la Justicia es algo importante debemos tener posiciones claras. Muchos se llenan la boca cuestionando lo mal que está el sistema judicial, la impunidad y demás. Si hay una persona que está hace años y ya fue presidente varias veces es Antonio Fretes, además de las causales propias, hay una responsabilidad básica del deterioro de dicho poder del Estado”, sostuvo.
“El prestador pide algo que solo se puede conseguir teniendo influencias en la Corte Suprema de Justicia. En un Estado de derecho, un cómplice como este no puede seguir integrando la Corte”, afirmó.
El contexto es el siguiente; el pasado jueves, una investigación periodística reveló que Amílcar Fretes, hijo de Antonio Fretes, recibió US$ 368 mil en concepto de honorarios de abogado, para dilatar el proceso de extradición de Mohamad Hijazi. Esto da a entender que Amilcar fue el elegido, debido a que su padre era miembro de la Corte Suprema de Justicia en ese momento. Este pago se habría producido en marzo de este año, mientras que la extradición se produjo en julio.
