Las autoridades colombianas han confiscado este año más de 622 toneladas de cocaína y superaron las 100.000 hectáreas de erradicación de cultivos ilícitos, informaron fuentes oficiales.
Al hacer un balance de las actividades de la fuerza pública en 2021 en la lucha contra el narcotráfico, el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo que hasta el momento «más de 622 toneladas de cocaína han sido incautadas. Más de 5.600 laboratorios destruidos para el procesamiento de pasta a base de coca».
En una visita a la base antinarcóticos de la Policía en Tumaco, población del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, el jefe de la cartera de Defensa dijo también que se superaron «las 100.000 hectáreas de cultivos ilícitos erradicadas».
Unas 143.000 hectáreas en Colombia están dedicadas a la plantación de hojas de coca, el principal ingrediente para la producción de cocaína, según un cálculo de la ONU.
Molano aseguró que como balance de cierre de año, «los resultados son positivos y por eso debemos seguir avanzando», por lo que la fuerza pública seguirá trabajando para erradicar los cultivos ilícitos, ya que la meta para este año es de 130.000 hectáreas.
COMBATE
Señaló que el Gobierno sigue empeñado en combatir los Grupos Armados Organizados (GAO) que delinquen en el país y que uno de los grandes éxitos fue la captura de Dairo Antonio Úsuga, alias «Otoniel», máximo cabecilla del Clan del Golfo, la mayor banda criminal del país dedicada al narcotráfico, a la minería ilegal, entre otros delitos.
Alias «Otoniel» fue capturado el pasado 23 de octubre en una zona rural de Necoclí, municipio del departamento de Antioquia, donde estaba cercado desde hace meses.
«El máximo cabecilla del Clan del Golfo, alias ‘Otoniel’, fue capturado (…) Las disidencias de las FARC siguen en reducción, gracias a las capturas que hemos hecho en el Meta, Guaviare y otros departamentos», recalcó el ministro Molano.
También murió el jefe del Frente de Guerra Occidental de la guerrilla del ELN, Ángel Padilla Romero, alias «Fabián», quien inicialmente fue herido en una acción militar en el departamento del Chocó y luego falleció en una clínica de Cali.
Molano reconoció los desafíos que existen en materia de seguridad para el Pacífico colombiano en donde las disidencias de las FARC, el ELN y otros grupos de narcotráfico se disputan las rentas criminales.
«Por eso la primera tarea (en 2022) es desmantelar esas organizaciones, que son las responsables de asesinatos de líderes indígenas, de líderes sociales, de líderes ambientalistas. Y la segunda tarea es desmantelar la estructura del narcotráfico que delinque en esta zona del país y es la encargada de alimentar esa violencia», puntualizó.
Concluyó diciendo que el «narcotráfico es la mayor amenaza en contra del Pacífico y por eso lo combatimos sin tregua y con decisión por lograr la defensa del país». EFE
