El agua, líquido vital en nuestro país, se encuentra con dificultades para las actividades agropecuarias, la larga sequía impactará negativamente sobre los cultivos haciendo que el Paraguay según pronósticos de una institución bancaria decrezca 1,7% este año; eso significa un gran rezago el país.
Crecer un 1% significa -al revés- sacar a un montón de gente de la situación de pobreza y darle nuevas oportunidades, y así como un positivo significa mucho el negativo significa igual o peor.
Son tiempos en los que tendríamos que estar pensando con seriedad también de qué forma podríamos acopiar agua durante un cierto tiempo de abundancia para luego distribuirlos en tiempos de carestía o de carencia.
El agua como recurso para los cultivos no ha sido utilizada de manera amplia como debiéramos a pesar de tener un aliado estratégico que es la abundancia de hidroenergía y el bajo costo comparativo que tenemos en la región.
Hay que mirar el contexto en su conjunto para dejar de lamentarnos por lo que ya son sus consecuencias. El mal año económico y la mala calidad del aire que inspiramos y aspiramos todos los días.