No todo se limita a citas médicas, terapias, visitas al psicólogo, psiquiatra o trabajos para recuperar alguna función perdida por algún accidente que haya dejado discapacitada a una persona.La tecnología tiene lo suyo para brindar al minusvalido oportunidades que no serían posibles en su condición cómo moverse solo y viajar a donde quiera para conocer espacios, gente y culturas particulares.
En Francia ya se encuentra capacitada la oportunidad de hacer viajes virtuales para personas discapacitadas En La Briancière, en Essonne.
Por un precio accesible una persona con discapacidad puede utilizar un lente o gafas de realidad virtual acompañadas de auriculares para hacer la experiencia más inmersiva en el lugar que desee visitar. Este es un dispositivo de visualización similar a un casco, que permite reproducir imágenes creadas por ordenador sobre una pantalla muy cercana a los ojos o proyectando la imagen del espacio visitado con ayuda de la red y toda la información.
Pasear y vivir
Esto alberga una plataforma que usamos todos para socializar nuestras vidas enseñando los destinos que visitamos y que al subir fotos o videos de los mismos en la red son reutilizados para nobles proyectos cómo el dejar que otras personas puedan también conocer estos parajes que no deben cerrarse al internauta que se encuentra trabajando o con el deseo de conocer algo más fuera de su oficina de 4 paredes o en su hogar frente a nuestras pantallas y teclados fríos que nos hacen perder la magia y encanto de socializar con otras personas. O quizás estar fuera de nuestros espacios de trabajo para conocer sitios que pueden darnos una apertura mental acerca de lo que el mundo tiene para ofrecer a todo interesado en viajar u oxigenar su mente recorriendo ciudades, barrios o países fuera de los suyos.
Experiencias posibles incluso con ejercicios que pueden ser más baratos y accesibles para todos en el planeta que es con la lectura y uso de la imaginación para que con las palabras redactadas e impresas de un autor en particular en un texto uno viaje en el planeta o fuera del mismo. Eso si es que tenemos el acceso a una biblioteca o libros que posean el atractivo suficiente para atrapar nuestra curiosidad y hacer que terminemos de hojear las páginas sin la interrupción de la tecnología que debe existir para ayudarnos y no distraernos ni hacer perder nuestro tiempo seamos discapacitados o no.
