Son tan interesantes los debates que uno puede encontrar a lo largo de la historia sobre el concepto de los subsidios. En algunos casos han sido herramientas que han ayudado a sacar grupos enteros hacia un mejor porvenir y en otros definitivamente solo sirven para mantenerlos en la pobreza, la injusticia social y la mendicidad por gracia de unos administradores de turno que prefieren la forma más fácil para no esforzarse en solucionar definitivamente con buenas políticas públicas y prefieren con “dos monedas” dar placebos que después de un tiempo, obviamente vuelve el dolor.
La definición básica de este concepto de subsidio es “Ayuda económica que una persona o entidad recibe de un organismo oficial para satisfacer una necesidad determinada”. Este año por el tema de la pandemia se han creado nuevos subsidios que mirando su efectividad, no sé si realmente han sido de impacto y pienso que todo ese dinero que se tuvo con la ley de emergencia, bien administrado y controlado, hubiera servido para ayudar de forma integral a muchos más sectores y no dar vergüenza con leyes como el de las “ollas populares”.
Esta reflexión nace desde la noticia que hoy comienza la veda pesquera en aguas compartidas con los países vecinos. La noticia habla que el Ministro Mario Varela del MDS será el encargado de dar este dinero, luego que su par, Ariel Oviedo del Mades, remita la lista de habilitados. En pos de la transparencia sería estupendo que la lista sea pública para evitar subsidiados “avivados”. Hasta el 18 de diciembre para ríos compartidos con Argentina y hasta el 31 de enero con el Brasil se extiende la veda en todo el territorio nacional.
Hace un par de años el gobierno lanzó una guía de servicios sociales del Paraguay, herramienta que contiene información de más de 180 programas de 30 instituciones del estado paraguayo. Como muchas cosas buenas que hacen, pero definitivamente comunican tan mal, este es un ejemplo de servicios y programas que pueden servir para dejar de pensar que se administra mal y se regala plata a los “amigos”.
El documento, textualmente dice que, tiene por objetivo proporcionar los mecanismos de acceso a servicios gubernamentales a través de un sistema de datos e información integrada y confiable que fortalezca la difusión de la oferta pública vigente en el país. La pregunta que me hago es cuánta gente sabe que existen estas herramientas y cuán desarrolladas están en materia de transparencia y anticorrupción como para blindarlas en el tiempo y sean políticas públicas que no se desvirtúen por el capricho de algunos improvisados políticos mal electos.
Es tiempo de controlar los subsidios y hacerlo por el bien de todos, porque cuando unos pocos “nomas” se benefician, otros sufren y se incrementan los descontentos… incluso por la democracia.
