Las elecciones de medio término en los EEUU que se creía teñiría de rojo (republicano) el mapa político no ha sido tal. Tampoco los seguidores de Biden (los azules) han quedado tan desencantados.
El proceso y sistema de votación en países cómo los EE.UU supone una complejidad tan intensa cómo el trabajo que tendría el elegido por hacer ya sea cómo alcalde, gobernador, presidente o parlamentario del país. uno que ahora ya tiene los resultados intermedios de 2022, sobre quienes y cuanto lugar ocuparía cada partido en la casa de los representantes para que estos parlamenten a favor de lo que su pueblo necesita.
Con estos números, fin la democracia de los EEUU asegura este propósito con la votación, dando el poder o kratos al demos o pueblo para que este sea el que elija a sus autoridades.
El día de ayer ya se realizó la primera parte del extenso trabajo de sufragio que tiene este país-continente que no sólo reúne a estadounidenses en su territorio sino a personas de distintos orígenes, clases sociales, religiones, tendencias políticas, sexuales y en la variedad que presente el mundo como oferta y propuesta para que uno elija cual le parezca más cómodo y útil apoyar.
El resultado de la votación sigue siendo incierto. más los demócratas podrían mantener el control del senado, donde quedan varios escaños por cubrir, y los republicanos tomarían la cámara de representantes.
El ejecutivo debe escuchar el mandato
Algunos dicen que los resultados de alguna forma predeciría la presidencia americana prevista para el 2024. que es la cita política más importante que tienen los políticos que disputarán de aquí a dos años que a su vez representa el retorno de un gobierno republicano o la continuidad democrática.
Biden, bastante mayor, preside uno de los países más complicados para definir y trabajar por una ciudadanía cuya principal preocupación es económica y en donde la inflación le ha cobrado varios votos a su partido.
Más de 213 millones de votantes estadounidenses fueron llamados el día de ayer a renovar parte de los mandatos del senado (cámara alta de la república americana) y la totalidad de los 435 escaños de la cámara de representantes. Estos se distribuyen en proporción a la población de cada Estado. Ganó un joven de 25 años un escaño en la camara baja, Massachusetts eligió a una lesbiana de gobernadora y un aborigen cherokee de Oklahoma llega al congreso. Algunos detalles curiosos de los resultados de ayer.
Muchos esperan que estas elecciones funcionen para lo que el poblador necesita que sean y no terminen siendo un fiasco habitualmente visto en países latinoamericanos que debemos entender para qué y porqué se da el sufragio y participar no para responder favores políticos o haber sido “arreados” como animales luego de haber vendido nuestro ejercicio libre de sufragar en paz sin incidencia de nadie o nada.
Nadie se llevó todo
El senado ha quedado formado por más demócratas que republicanos, lo que significa que este lugar tendería hacía ideas y políticas más cercanas a Biden aunque eso aun está por definirse en varios Estados.
Cosa que ya fue dejada en claro en las últimas presidenciales cuando Biden (partido demócrata) venció a Trump (republicano) y que de ahora en más quizá significaría que los republicanos tengan que prestar atención a las maniobras demócratas en el congreso y otras referencias que formaron parte de las propuestas que se elevaron a la consideración ciudadana en estas elecciones.
Varios puntos que demandan atención como lo relativo al género, la portación de armas, el aboryo, la cuestión racial y varios otros que saturan la agenda de los parlamentarios elegidos cuya decisión servirán para un mundo que toma referencia lo que demanda el estadounidense y las medidas tomadas al respecto a veces para imitar, criticar o estudiar el porqué se han dado estos hechos.
Lo que ocurrirá de ahora en más, está por verse pero el electorado americano ya habló.