Tres analistas políticos fueron consultados para dar su opinión sobre la coyuntura política actual. La analista política, Estela Ruiz Díaz, dio su opinión sobre el atentado del Comando Vermelho, manifestó que es un golpe letal porque empeora el escenario de crisis de seguridad que se viene dando con los motines en las cárceles donde tienen preeminencia los integrantes del PCC y del Comando Vermelho, que han demostrado su poder en más de una ocasión. Para el analista político Alfredo Boccia, el gobierno de Mario Abdo parece tan frágil que cualquier pequeña turbulencia en el horizonte político parece afectarle. “Un atentado como el que vimos, normalmente no produciría una sensación de desgobierno tan fuerte si es que la confianza hacia Mario Abdo no estuviera ya deteriorada”, expresó.
Por su parte, Guzmán Ibarra, politólogo, indicó que la imagen del presidente estaba deteriorada antes del evento de rescate. “Casi el 70% de la población había aplazado su gestión. Sin duda alguna esta situación, no contribuye a mejorar su imagen ante la ciudadanía. Será muy importante que los cambios que produzca en el ámbito de la seguridad ocasionen resultados en breve”, expresó. Señaló que la gobernabilidad corre por otro andarivel. “Y muestra de eso son algunos cambios realizados. Lo importante para el poder ejecutivo es asegurar una coalición parlamentaria que le otorgue cierta estabilidad, y en alguna medida eso lo consiguió”, sostuvo.
Respecto a la destitución del ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, Ruíz Díaz dijo que Mario Abdo no podrá sostenerlo por mucho tiempo más. “No lo cambia porque es uno de los políticos más hábiles de su gabinete. Más que el ministro, aquí el foco debe ser la Policía que es una mafia que opera en paralelo al manejo político de la institución (Interior). La corrupción policial es una de los peligros más graves de la seguridad nacional, al que se suman elementos corruptos de la Fiscalía y de la Justicia”, comentó.
Boccia comentó que “el problema no es si debe destituir o no la ministro del Interior, no es el peor, es un gran aliado y un vocero importante. El problema es que deben hacerse cambios de fondo para que se visualice alguna política de estado de Seguridad que hasta el momento no se vio”, expresó. Para Guzmán, hay dos formas de ver este problema. “Una diacrónica, es decir la historia completa y otra sincrónica, el episodio. La historia larga es que el problema del combate al crimen organizado y trasnacional es un asunto complejo que involucra la acción de diferentes estados y al interior de cada uno, de diversas instituciones” refirió. Señaló que en ese contexto tenemos una debilidad muy importante -que en la Ciencia Política se refiere como de la Capacidad Estatal- en este caso estamos hablando desde debilidades en su sentido más básico: del monopolio legítimo de la fuerza.
Sobre la destitución del Comandante de la Policía Nacional Estela dijo que la única manera de ir depurando las instituciones es cuando hay castigo y las cúpulas tienen responsabilidades políticas. “Acá hubo responsabilidad del Ministerio de Justicia y de la Policía”, aseveró. Guzmán por su parte alegó que es la respuesta a la tensión del ambiente. Y en este caso, actuó como fusible. “De todas maneras, no hay que perder la mirada en el problema profundo y sus diferentes facetas. La policía debe ser mejorada y fortalecida. De acuerdo con los datos del Latinobarómetro, en los últimos años cerca del 70% de la ciudadanía paraguaya tiene poca o ninguna confianza en la Policía”, recordó. Por su parte, Boccia afirmó que la salida del comandante Walter era cantada, no porque tuviera la culpa de lo sucedido, sino porque Mario Abdo no realizó los cambios que había prometido desde la crisis de Itaipú. “Si no lo sacaba a Viallamayor el fusible siguiente era el Comandante”, puntualizó.
Consultada sobre la salida de Rodolfo Friedmann del Senado para ir al frente del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la politóloga dijo que fue un grave error porque no fue una decisión basada en la evaluación de la gestión del ministro Lichi. “No lo cambia por sus errores, sino para resolver una crisis interna con el cartismo, que pedía la salida de Frieddman del Senado. Además, hay una situación de emergencia en el campo, incendios, en fin, hay crisis en el sector agropecuario, que requieren un ministro con conocimiento del área. Y la respuesta está a la vista, los sectores afectados están en pie de guerra por la decisión presidencial. La economía paraguaya es agroganadera y eso requiere idoneidad de las autoridades del área” argumentó.
Estela afirmó que Mario Abdo debió hacer cambios en su gabinete el 15 de agosto. “Por su falta de decisión, la crisis lo está empujando a estos cambios”, dijo. Por su parte Guzmán expresó que “algunas dependencias son muy cuestionadas. Pero el presidente Abdo sigue la práctica de la mayoría de los presidentes de la región. Si hay cambios en el gabinete, los mismos son respuestas a crisis puntuales, escándalos etc. O bien son resultado de cambios y reacomodos en la coalición de facciones que sostienen al gobierno. Ese parece ser su patrón de cambio”. Boccia alegó que la salida de Friedmann es la señal completa de la claudicación frente a las exigencias de Horacio Cartes. “Pero Friedmann en el MAG solo genera una reacción de disconformidad. El presidente jugó mal sus cartas”, calificó.
Finalmente, sobre el futuro del Gobierno de Mario Abdo, Estela sostuvo que es difícil vaticinar porque no hay una reacción decidida del presidente. “Es como un barco a la deriva cuyo rumbo van marcando las crisis coyunturales.
DATO 1: Los analistas sostienen que si Mario Abdo continúa así no terminará su mandato.
DATO 2: El presidente de la República debe hacer cambios en su gabinete si quiere evitar un juicio.