Comentario 3×3
Por Benjamín Fernández Bogado
Muchas de las situaciones que se presentan hoy en las penitenciarías tienen que ver con el hecho de la lentitud de la justicia en sancionar casos que son llevados a su estudio. El 80% de los presos no tienen condena, y pasan un año, dos años, a veces terminan recuperando su libertad después de haberse probado su libertad desde el inicio. Quién le devuelve la vida pasada en nuestras penitenciarías que ya de por sí constituye una penitencia en la vida del ser humano.
Cuando veamos que algún preso salido de nuestras prisiones le hace un juicio al Estado paraguayo y le castiga al juez que no hizo la tarea cuando debiera, o al fiscal, o al defensor público que no le defendió como debiera, en ese momento cambiará la lógica. De momento estamos esperando que el ser humano por obra y gracia de algún extraño maleficio tenga que cambiar las circunstancias actuales, y eso no ocurre de manera real. Lo que debemos hacer es establecer normas que sancionen a los magistrados que no hacen su tarea y que debería causarles vergüenza que el 80% de los reos en nuestras penitenciarías que alcanzan 15 mil no tengan condena, que no haya más motines es una cuestión milagrosa y valdría la pena estudiarla.