En el Día Nacional de la Lucha por la tierra, y en homenaje a los caídos en la masacre de Curuguaty, ocurrida el 15 de junio de 2012, la Federación Nacional Campesina, junto a su secretaria, Teodolina Villalba, reafirmaron el compromiso de luchar por la reforma agraria y contra el latifundio, e instaron a todos los campesinos, campesinas e indígenas sin tierra a organizarse y empuñar la bandera de lucha.
“Reiteramos el llamado a todos los sectores honestos, patrióticos y democráticos a sumarse a esta lucha, única vía para enfrentar la crisis profundizada actualmente por la pandemia del coronavirus, avanzar hacia la conquista de una patria nueva y honrar la sangre derramada en la lucha por la tierra y el desarrollo nacional”, afirmaron desde la Federación.
Cabe resaltar que la desigualdad en la tenencia de la tierra en el Paraguay es casi absoluta y la peor en el mundo: 0,93 según el Índice de Gini que mide la desigualdad. La tenencia de la tierra está concentrada en pocos terratenientes (alrededor de 3.000), 2,6 % del total, que concentran el 85,5 % de las tierras. Mientras 241.000 pequeñas y pequeños productores con hasta 20 hectáreas poseen el 4% de las tierras y existen más de 300.000 familias sin tierra.
“Este modelo económico basado en el latifundio y la agroexportación excluye a la mayoría, generando enormes desigualdades sociales, creando dependencia e inseguridad alimentaria. Hoy día, con la pandemia del coronavirus y las medidas sanitarias, está más que demostrado que no es sostenible en ningún lugar del mundo un modelo que se sostiene con la violencia, la represión, la muerte o el terrorismo de Estado”, mencionaron.
Finalmente, explicaron que el acaparamiento de la tierra por parte de latifundistas, agroexportadores, especuladores, que tienen a su servicio, como fieles capataces, a Mario Abdo Benítez, el Poder Judicial y el Congreso, así como los sucesivos Gobiernos, es una guerra contra el bienestar de la mayoría y el desarrollo nacional.
“Todas las emergencias que amenazan la alimentación, la salud, la educación, el trabajo, la felicidad, la vida, tienen sus raíces en el latifundio. La lucha continua, Venceremos”, concluyeron.
