Alejandra González Brizuela, Fátima Fernández Cantero y Maria Liz Stein Dávalos son estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional del Este(UNE) hicieron un trabajo de investigación sobre el nivel de avance de la igualdad de género en Paraguay.
“Tomamos como eje el Plan Nacional de Desarrollo Paraguay 2030 que tiene como uno de sus objetivos la igualdad de género y básicamente lo que buscamos con este trabajo es ver en cuánto se avanzó y cómo estamos posicionados a nivel país”, expresó.
Las estudiantes analizaron; el acceso equitativo y participativo de las mujeres en estructuras de poder, la existencia de la perspectiva de género en documentos, planes y normativas
de las instituciones públicas y la participación de las mujeres en los ámbitos económicos y sociales.
“Para nuestro análisis final utilizamos el semáforo específico de indicadores que utiliza el Plan Nacional de Desarrollo para analizar el avance de sus objetivos, donde el verde indica que vamos por buen camino y que para el 2030 se llegará a cumplir los objetivos propuestos. El amarillo que hay avances pero no al ritmo deseado como para llegar al 2030 y finalmente el rojo que significa que no se está avanzando. Con el estudio de nuestras variables identificamos que estamos en amarillo donde avanzamos pero a pasos lentos”, afirmó.
Expresó que todavía existen muchos ámbitos donde la mujer mantiene una brecha con el hombre. En contrapartida en algunas variables se denota avances a traves de los años.
RESULTADOS
En servicios financieros hay una preponderancia de los hombres. En cuánto a aportes de IPS, las mujeres son las que más aportan, pero tienen una brecha promedio de 5 puntos porcentuales en cuanto a los hombres en la tasa de desocupación. Es decir, a pesar de tener la mayor cantidad de personas desempleadas, las mujeres son las que más aportan al IPS.
También existe desigualdad en el nivel de remuneración donde las mujeres continúan recibiendo menor salario que los hombres. Lo mismo ocurre con el porcentaje de la población en situación de pobreza.
Otro aspecto interesante es la baja participación de mujeres en cargos directivos.
“Todo esto lo hicimos en base a los datos obtenidos de instituciones públicas y organizaciones internacionales. Los años estudiados fueron del 2017 al 2020″. El trabajo lo realizaron durante el periodo de un año en el 2021, se encargaron de recopilar los datos obtenidos del BCP, la Dirección general de estadísticas, encuestas y censos, Secretaría de la Mujer, Secretaría Técnica de Planificación, La Organización de las Naciones Unidas (ONU), ONU Mujeres, CEPAL entre otros, manifestó.