Lee McClenny, embajador de los Estados Unidos, publicó un tuit donde celebraba la última decisión de la Corte Suprema de Justicia de hacer públicas las declaraciones juradas, como así también el veto presidencial al proyecto que buscaba despenalizar su falseamiento (ver tuit al final del artículo).
A esta publicación se suman otros apoyos y felicitaciones.
El Dr. Víctor Raúl Benítez González, economista, analista de negocios y director de Planner Capital, analizó esta serie de publicaciones. Para el analista, Mario Abdo Benítez, presidente de la República, debe empezar a “rentabilizar” estas felicitaciones. Es decir, sacar un provecho económico a cambio de las decisiones que se toman alineadas a las políticas de Trump.
“EE.UU y la Organización Mundial de la Salud (OMS) están separadas. Nosotros empezamos la cuarentena antes de las recomendaciones de la OMS. Le decimos no a China y si a Taiwán. Estamos matando a Ciudad del Este prohibiendo la importación de productos chinos. Es momento que saquemos un rédito económico por esas políticas”, explica Benítez.
Por ejemplo, el entrevistado recomienda pedir a Trump el arribo de una fábrica de autopartes norteamericana de la marca Ford que exporte su producción al Brasil para compensar la caída de los ingresos en el este.
“También pueden venir a instalarse en el Chaco donde es más fácil trabajar. Así también podemos pedir que nos compren carne de cerdo y alimentos para cerdo que ellos necesitan”, explicó.
APOYO AL STATU QUO
A inicios de junio, McClenny también publicó un llamativo tuit donde se mostraba a favor de la gestión del Poder Judicial, esto en coincidencia a que existían rumores de juicio político a Sandra Quiñónez, fiscal general del Estado en esos días.
El entrevistado explica que el apoyo de los norteamericanos no es para Sandra Quiñónez sino para el “statu quo”, es decir, dejar las cosas como están.
“Por más que sea mala su gestión (de Quiñónez) no le conviene a los EE.UU un juicio político. Lo que más le interesa a ellos es la estabilidad económica y política de nuestro país”, argumentó.
El analista sostuvo que las riquezas que se generan en el país al año (PIB) solo un 10% es producto de los impuestos que terminan como recursos para la administración pública (US$ 4.500 millones). Es decir, que lo que el embajador apoya es que el restante 90% (riquezas generadas del sector privado) sigan funcionando bien ya que entre ellas existen muchas empresas norteamericanas. Si se produjera un juicio político se correría un riesgo político.