Los gobiernos municipales son los que se vinculan de manera más inmediata con el ciudadano y son, los que se encuentran en primera línea de las urgencias urbanas.
Sus funciones están signadas por ley Orgánica; éstas, comprenden un abanico de disciplinas como el medio ambiente, transporte, construcciones, cementerios, almuerzos escolares, tránsito, obras pluviales.
Analizando las previsiones de la ley y los presupuestos respectivos, en especial, las transferencias del gobierno central por Royalties y FONACIDE, podríamos estimar que las necesidades urbanas están cubiertas en Paraguay. Sin embargo, las noticias que aparecen en días de lluvia, revelan las carencias de nuestras ciudades: falta de desagües pluviales, caminos, calles y avenidas, en pésimo estado; otras noticias señalan la ausencia de vertederos regulares, una cuestión relevante para el medio ambiente.
En fin, un rosario de problemas estructurales invade a nuestras ciudades, sin que el ciudadano pueda saber por qué no funcionan los gobiernos locales.
Los organismos de control, apenas revisan el cumplimiento de la ley en las gestiones de los gobiernos locales, pero esa revisión es insuficiente para formar un diagnóstico de cada municipio: Cuantos municipios cuentan con vertederos regulares, cuántos tienen desagües pluviales o cual es el nivel de infraestructura de caminos vecinales, rurales y otras vías de conexión?
Si existen leyes y presupuesto, se puede aventurar en concluir que la pieza que falta es un modelo de gestión municipal, tarea que puede ser abordado por los Gobiernos Departamentales en lo que respecta a obras públicas, energía, agua potable o aquellas que afecten a más de un municipio.
