Como una de las medidas implementadas por el Gobierno Nacional, el primer mandatario de la nación, Mario A. Benítez, decidió pasar el feriado del “Día del Trabajador”, al 2 de mayo “a fin de seguir reactivando nuestra economía”. Sin embargo, la situación de pobreza en la que se sigue encontrando el país, sin dejar de mencionar la endeble situación laboral, se anteponen a la pretendida reactivación.
La Misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyó en un informe que para este 2022 a nuestro país le espera un menor crecimiento en la economía, una mayor inflación de lo que se proyecta y hasta riesgos fiscales.
Por otra parte, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), luego de la crisis sin precedentes que significó la pandemia del Covid-19, ha crecido la situación de informalidad para el sector laboral del país, con más de 22 mil personas insertadas en dicha área. En el tercer y cuarto trimestre del año pasado ingresaron unos 42 mil trabajadores.
Esto sin mencionar que la Ley 1723 que autoriza al Ejecutivo trasladar los feriados al día lunes, señala en el Art 3: el decreto que establezca el calendario anual de feriados deberá fijarse con seis meses de antelación al año para el cual debe regir.
MEDIDA POPULISTA
Para la comunicadora, politóloga y docente, Clara Martínez, la medida adoptada por el Presidente resulta insuficiente porque en realidad se necesita la implementación de políticas públicas para reactivar verdaderamente la economía con el objetivo de generar un impacto positivo en toda la población.
Clara Martínez
“En estos momentos se está viviendo una verdadera crisis económica y hay una mayor desigualdad social. Estamos en un momento en el cual se debería trabajar con más fuerza en la reactivación económica y el Gobierno Nacional no realiza proyectos serios para generar cambios”, destacó la especialista.
Así también, la profesional habló de otro problema que afecta en gran parte a las instituciones y la economía del país: la corrupción. En ese sentido, resaltó la importancia de poner en marcha planes y herramientas que puedan ayudar en la lucha contra la falencia mencionada, pues sin eso tampoco podrá proyectarse un verdadero progreso, a decir de Martínez.
“Aparte de ser populista, la decisión de Marito en realidad es una medida que beneficia a una sola parte, como al sector turístico. No obstante, no todos podremos realizar actividades turísticas porque las enormes necesidades constituyen la realidad de muchas familias en el país”, puntualizó la politóloga.
En cuanto a los trabajos que deben realizarse en el gobierno, la comunicadora habló de la importancia de la aplicación de tareas interinstitucionales, involucrando a todos cada uno de los sectores del país, mejorando también la imagen internacional, generando así una marca país.
Dentro del punto, para la profesional, el posicionamiento internacional representará un puntapié para vaticinar poco a poco mejores resultados en términos económicos y financieros, pues eso generará un perfil más respetable para nuestro país, teniendo en cuenta la generación de malas referencias exteriores.
Por otra parte, la impunidad seguirá marcando un gran obstáculo para la reactivación económica. En cuanto a la resolución de inconvenientes, Martínez destacó que la ciudadanía no debería dejar a un lado su rol como contralora.
“Estamos en un año electoral y hay muchas promesas, hay campañas sucias, se descuida el lado económico y las familias quieren respuestas concretas porque no tienen ningún posicionamiento por parte del Estado”, declaró la especialista.
Frente a ello, la politóloga resaltó que incluso los índices de pobreza se mantuvieron en un 40%, mencionando también que teniendo en cuenta esos datos, se siguen vendiendo fantasías, esperanzas y propuestas que ni siquiera son estudiadas.
“Me gustaría que nuestros políticos puedan hacer una gestión eficiente, priorizando los intereses del pueblo antes, para ver resultados concretos, beneficiando a la mayoría de los paraguayos”, resaltó la especialista.
