martes, noviembre 5, 2024
26.3 C
Asunción
InicioSin categoría“El tiempo pasó y se consolidó la impunidad”

“El tiempo pasó y se consolidó la impunidad”

Categoría

Fecha

La persecución política y las violaciones de derechos humanos durante el periodo de la dictadura de Alfredo Stroessner dejaron una herida que aún no ha terminado de sanar en el Paraguay.

El período de tiempo más largo en que una sola persona tuvo el poder en un país de América del Sur marcó aspectos en el ámbito político, económico y cultural. A 32 años de la caída de la dictadura y el nacimiento de la llamada democracia se recuerdan a las 337 personas desaparecidas, que en su mayoría aún no fueron localizadas y, por ende, sus familiares no han podido hacer su duelo.

El abogado Hugo Valiente, investigador de la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), comentó que más que una inversión pública importante, porque no es un número excesivo el de las personas desaparecidas, hace falta una voluntad política.

El equipo encargado de encontrar a estas víctimas de la dictadura, la Dirección de Reparación y Memoria del Ministerio de Justicia, no tiene los medios suficientes para poder proseguir con el programa de búsqueda. Hasta el momento, de las osamentas correspondientes a 40 personas desaparecidas, fueron identificadas apenas 4 y los resultados son muy modestos.

“Los familiares siguen sufriendo las secuelas traumáticas de este fenómeno represivo tan cruel, que es la desaparición forzada, no tienen un lugar, un panteón, para poder hacer su duelo y cerrar esas heridas que quedan abiertas con la muerte de un ser querido”, señaló Valiente.

Mencionó el caso de los perpetradores, que según la Comisión de Verdad y Justicia, fueron 450 personas entre funcionarios públicos, policías y civiles involucrados en los operativos donde asesinaron a estas personas, involucrados en la represión. Solo 8 fueron condenados, o sea, un 1.7%, la mayoría de los represores fallecieron con impunidad.

“Al inicio de la transición a la democracia se debió haber hecho un programa más contundente para realizar la búsqueda teniendo la información disponible, como sucedió con otros países en los que se hicieron acuerdos de cooperación con soldados que cumplían las órdenes, se les decía que les iban a disminuir la pena a cambio de testificar dónde estaban las tumbas. Eso no se hizo, se dejó que el tiempo pasara, limando las cosas y que se fuera consolidando la impunidad”, ratificó el abogado.

A diferencia del caso chileno o argentino, en donde las víctimas fueron arrojadas al mar, a las personas que desaparecieron en Paraguay se las enterró en la tierra, sobre todo en el patio de instituciones públicas.

“Hay que cruzar información, acceder a archivos, interrogar testigos, ir estableciendo un mapa con los puntos donde estarían las fosas clandestinas. Tenemos que seguir hablando de estos temas, leer, los pueblos que olvidan su historia, los horrores por los que pasaron, están condenados a volver a repetirlos”, afirmó el investigador de Codehupy.

LA DIRECCIÓN

Para Rogelio Goiburú, director de Reparación y Memoria del Ministerio de Justicia, es necesario que toda la familia que tenga un desaparecido pueda hacer su duelo y esto se hace cuando se sabe dónde está el ser querido y si tiene sus restos, poder rendirle un homenaje.

“Estos son delitos que ha cometido el Estado, crímenes aberrantes y es responsabilidad de ellos hacer la reparaciones y la primera reparación es buscarlos y encontrarlos. Debe existir una voluntad política de que esto no se vuelva a repetir en el tiempo, dando visibilidad y recordando siempre, no para sufrir y llorar, sino para decir que estas cosas no pueden volver a suceder”, acotó-

Explicó que lo mejor que puede pasar a los paraguayos es que mantengamos una democracia y que vayamos perfeccionándola.

“Hasta el momento este modelo de democracia no satisface a la amplia mayoría de la ciudadanía, no soluciona ni los problemas más graves. Tenemos que hacer más participativa a la ciudadanía, de tal manera a que la democracia sirva a los intereses de la mayoría”, resaltó.

Recordó que habían conseguido un presupuesto a través del Poder Legislativo para continuar con los trabajos de investigación, búsqueda e identificación, pero con la pandemia quedaron inmovilizados. También expresó que ese dinero que consiguieron a través del Parlamento debe ser respetado por el Ejecutivo.

Por otro lado, lograron tener un Banco Genético de familiares de desaparecidos, pero hay que seguir alimentando la base de datos porque no todos los paraguayos familiares de desaparecidos han dado su sangre.

“Logramos realizar el perfil de la población paraguaya y a pesar de que vamos muy lento, seguimos luchando, empujando”.

LA INEQUIDAD SOCIAL

La compensación por la memoria, a decir del sociólogo Carlos Martini, fue una lucha de los familiares, ciertos sectores sociales y partidos políticos, hay que reconocer que no fue una cuestión social general del Paraguay.

“Una parte de la población cuando salía de la dictadura lo hacía con huellas desde el punto de vista de su comportamiento. Lo que sí es cierto que una vez pasado el tiempo hubo una mayor conciencia de una sociedad que tiene derechos a exigir, no solamente a obedecer. Se fue gestando una sociedad donde hay mayores manifestaciones, indignación ante determinados hechos, mayor conciencia democrática”, enfatizó Martini.

Agregó que a medida que hubo mayor libertad de expresión y organización, se tomó mayor conciencia y al asumir las posibilidades que fueron brindando las libertades públicas luego de la dictadura, los conceptos fueron cambiando.

“Todavía hay mucha impunidad en el país, existe un sector que se beneficia en términos económicos y políticos independientemente de la ley y la característica de un estado de derecho social democrático es la igualdad de todos y eso no tiene Paraguay, hacen incierto el futuro democrático del país por la tremenda inequidad social, hay una falta de igualdad de oportunidades que vacían de contenido a la democracia”, concluyó el sociólogo.

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.

IA y suicidio

EEUU elige su destino

España ahogada